Dónde alojarse en Milán

El barrio de San Siro es una amalgama de vecindarios, bloques de apartamentos y espacios verdes que se encuentra a un breve trayecto en coche del corazón de Milán en dirección oeste. Lo más destacado es, sin duda, el imponente estadio de San Siro. Con capacidad para 80 000 espectadores, es uno de los de mayores dimensiones de toda Europa y en él se celebran tanto partidos de fútbol de máxima relevancia como conciertos de música.

En los alrededores encontrarás el hipódromo de San Siro. Este extenso recinto acoge carreras de caballos, así como grandes conciertos musicales y festivales. Uno de los principales eventos anuales es el Milano Summer Festival, en el que han actuado algunos de los artistas más destacados de la escena musical internacional, desde Iron Maiden hasta Marilyn Manson.

El barrio de Navigli se encuentra al sudoeste del centro de Milán y es una de las zonas más creativas y vanguardistas de la ciudad. La vida social gira en torno a los canales, cuyas orillas están flanqueadas por cafeterías con terraza, originales establecimientos y galerías rebosantes de actividad. Una forma estupenda de conocer tanto su animada vida nocturna como la historia del barrio es hacer una visita guiada con degustación de cerveza.

Los restaurantes del barrio de Navigli son variados y modernos, y en muchos de ellos podrás degustar pescado fresco y originales reinterpretaciones de platos internacionales. Si te apetece relajarte en una atmósfera más tranquila, dirígete a una de las cafeterías de estilo parisino y saborea la gastronomía de fusión, acompañada de una cerveza refrescante.

Porta Garibaldi, al norte del centro de Milán, es un imponente arco neoclásico que ocupa el lugar donde antes se hallaba una de las antiguas puertas de la ciudad. Desde ahí podrás divisar las torres de cristal de los rascacielos del centro financiero y elementos más tradicionales, como la iglesia de Maria Incoronata.

La estación de Porta Garibaldi queda tan solo a un paseo de cinco minutos por el barrio de Corso Como, famoso por su vida nocturna. Si haces una parada en las originales galerías comerciales 10 Corso Como, podrás echar un vistazo a las últimas novedades en moda o saborear un delicioso cóctel elaborado al momento para ti.

Al noreste del centro de Milán se encuentra Città Studi, el barrio universitario de la ciudad, donde está la mundialmente reconocida Facultad de Ciencias. Città Studi se construyó en 1915, pero ha evolucionado a medida que ha ido creciendo la universidad. En la década de 1960 se abrió la nueva Facultad de Biología, obra del famoso arquitecto Vico Magistretti.

Città Studi tiene un ambiente intelectual mucho más allá que un típico barrio estudiantil. Sus amplias calles verdes la convierten en un lugar ideal para refugiarse del ajetreo del centro, aunque la ciudad se encuentra a una parada de metro y las tiendas de Corso Buenos Aires están a tan solo 18 minutos a pie.

Porta Romana es una antigua puerta de la ciudad que data del siglo XVI. Sin embargo, esta zona hace mucho que abandonó el aire aristocrático propio de sus orígenes: en la Fondazione Prada hay un bar con diseño de Wes Anderson, en QC Terme Milano han reconvertido un tranvía en una sauna y los hípsteres se reúnen fuera de los bares que solo sirven bebidas para llevar.

Si te apetece ir de compras y conseguir diseño italiano de vanguardia, dirígete al Viale Monte Nero, la principal calle comercial, y echa un vistazo a Open. Al final del día, no hay nada mejor que tomar algo en uno de los bares de moda ocultos entre bloques de apartamentos.

El casco antiguo de Milán está repleto de elegantes casas con balcones, antiguos monumentos y soleadas plazas bordeadas de edificios centenarios con estilos que varían desde el gótico al renacentista. La joya del barrio es, sin duda, la catedral de Milán, famosa por su majestuosa fachada de piedra, sus vidrieras y una gran cantidad de obras de arte religiosas.

Si lo tuyo es la moda, no puedes perderte la lujosa Galleria Vittorio Emmanuelle II. Esta elegante construcción con techos de cristal alberga numerosas tiendas de marcas de lujo, bares y cafeterías de postín. Si después de las compras te apetece asistir a algún espectáculo, el lujoso Teatro alla Scala es, sin lugar a dudas, el lugar perfecto.

El barrio de Bovisa, al norte del centro de la ciudad, todavía conserva reminiscencias de su pasado obrero, patente en edificios industriales de poca altura y depósitos de gas abandonados. Muchas de sus construcciones se utilizan actualmente para otros fines, por ejemplo, la Facultad de Arquitectura del famoso Politécnico de Milán se ha instalado en una fábrica restaurada.

La regeneración de Bovisa todavía sigue en curso, pero en este barrio no faltan los restaurantes y bares asequibles a los que suelen ir los estudiantes y donde podrás degustar platos tradicionales de la gastronomía italiana en un entorno relajado. Asimismo, en la zona encontrarás locales eclécticos y espaciosos, con una diversa oferta musical que varía desde swing hasta las orquestas bálticas.

Porta Vittoria es un barrio tranquilo al sudeste del centro de Milán repleto de edificios art nouveau y de posguerra, que se ha posicionado como uno de los rincones favoritos de los amantes de las compras. En sus pintorescas tiendas podrás adquirir desde joyería hecha a mano hasta originales objetos de recuerdo.

El WOW Spazio Fumetto es un alegre y divertido museo dedicado a los cómics y las novelas gráficas, perfecto para pasar una jornada muy agradable en familia. Si te apetece vivir una experiencia realmente conmovedora, no dudes en unirte al recorrido Dialogo nel Buio del Instituto de Ciegos de Milán, donde podrás realizar una visita inmersiva y muy emotiva en total oscuridad.

El barrio de Porta Venezia está situado a solo unos minutos al norte del casco antiguo de Milán, y su epicentro es Corso Buenos Aires, que constituye la principal arteria del barrio. En esta animadísima y siempre abarrotada calle encontrarás una mezcla multicultural de zapaterías, grandes almacenes y tiendas de ropa muy económicas.

El barrio toma su nombre de la Porta Venezia, una puerta del siglo XIX que constituye un llamativo ejemplo de arquitectura italiana, con sus majestuosas columnas, la balaustrada de la parte superior y estatuas esculpidas hasta el más mínimo detalle. Justo al lado están los frondosos y exuberantes Giardini Pubblici Indro Montanelli, un parque que alberga el Museo de Historia Natural de Milán próximo a la palaciega Galleria d'Arte Moderna.

El barrio chino está situado a solo unos minutos en coche del centro de Milán en dirección norte. Esta zona prácticamente peatonal, que se estableció en la década de 1920 alrededor de la Via Paolo Sarpi, está decorada con numerosos farolillos chinos de color rojo y rodeada de edificios elegantes.

En la calle y sus alrededores encontrarás de todo, desde tiendas de ropa y seda hasta librerías, establecimientos de venta de remedios varios y peluquerías. El principal atractivo de la zona es, sin duda, su variada oferta de restauración, que impregna las calles con aromas irresistibles. En muchos de estos establecimientos podrás degustar la auténtica cocina de Zhejiang, con platos como el cerdo Dongpo y el cangrejo con hibisco.