10 consejos para ahorrar en Burdeos

La Grosse Cloche, o Gran Campana de Burdeos cuelga de dos torres de planta redonda conectadas por un edificio central ubicado en la Rue Saint-James. Ambas torres coronan la puerta de San Eloy, una de las entradas de las murallas defensivas que daban acceso a la antigua ciudad y que se sitúa entre Cours Victor-Hugo y la citada Rue Saint-James. En el pasado, esta campana tenía un papel fundamental para las vidas de los bordeleses, ya que se empleaba para anunciar el comienzo de la época de cosecha y para alertar a la población si se producía un incendio.

En la actualidad, se ha convertido en un auténtico símbolo que aparece, incluso, en el escudo de armas de la capital de Gironda. Si quieres escucharla, debes venir a mediodía el primer domingo del mes. Dado que pesa casi ocho toneladas, el riesgo de que las vibraciones que produce al repicar generen grietas en el edificio no es nada desdeñable, de ahí que solo lo haga una vez al mes.

Burdeos se construyó a orillas del Garona, y un paseo junto a sus aguas siempre regala vistas muy hermosas de la ciudad. Te recomendamos reservar tiempo para deambular por la zona sin prisas y cruzar de un lado al otro por el puente de piedra o por el puente levadizo de Jacques Chaban-Delmas. La orilla izquierda ofrece el bello paisaje de las fachadas del siglo XVIII, mientras que la derecha presenta un aspecto más salvaje gracias a la bonita vegetación de los jardines botánicos.

Se trata de un lugar muy popular en Burdeos para caminar los domingos. Quien dice caminar, dice también montar en bici o patinar en familia. Después, podéis terminar la mañana de compras en la zona de Quai des Marques, con cerca de 30 tiendas de moda prêt-à-porter. Cuando las piernas pidan un descanso, hazles caso y elige una de las terrazas de las cafeterías y restaurantes cercanos. Si tus hijos son aún pequeños, podrán pasarlo en grande en el tiovivo y, si ya son más mayores, tendrán muy cerca las pistas de skate o el parque deportivo de Saint-Michel.

El jardín público de Burdeos, o Jardin Public, constituye un tranquilo refugio en unos terrenos de más de 10 hectáreas situados en el centro de la ciudad. La entrada principal se encuentra en Cours de Verdun, detrás del CAPC, el Museo de Arte Contemporáneo. Si visitas la localidad entre abril y noviembre, podrás contemplar las fotos que se exponen en las puertas de hierro forjado que dan acceso al parque.

Clasificado como "jardín de belleza excepcional", este recinto cuidadosamente preservado es perfecto para relajarse después de un día en la ciudad. Con árboles centenarios, un lago, puentes de hierro forjado, estatuas y un viejo carrusel, comprobarás que se trata de un lugar que invita a perderse en las propias reflexiones y olvidarse del mundo. Además, también es un entorno de ensueño para dar un paseo romántico y, si viajas en familia, podrás pasar un día divertido con los niños. Encontrarás amplias zonas de césped y parques infantiles en los que podrán corretear y disfrutar al aire libre.

El Centro de Interpretación de la Arquitectura y el Patrimonio, o CIAP, conocido también como Bordeaux Patrimoine Mondial, es una fuente de información sobre la ciudad, su historia y los eventos que le han dado forma. Ubicado en un bello edificio de estilo inequívocamente bordelés en la emblemática plaza de la Bolsa, la institución se creó tras la inclusión de la capital de Gironda en la lista de lugares declarados Patrimonio de la Humanidad por la Unesco.

Si vives en Burdeos o en los alrededores y quieres conocer detalles sobre su pasado y su futuro, este es el mejor lugar para ello. Si, por el contrario, es tu primera vez en este destino francés, es buena idea empezar tu visita aquí para apreciar mejor los monumentos y edificios que verás después. La entrada es gratuita y podrás ver documentos de archivo, mapas y maquetas, así como exposiciones interactivas que te permitirán descubrir (o redescubrir) Burdeos.

La plaza de la Victoria es un lugar imprescindible para salir por la noche y disfrutar de la oferta de ocio de Burdeos. Esta explanada, situada en el cruce de diversas arterias de la ciudad, incluida la calle comercial de Sainte-Catherine, cours Aristide-Briand, cours de l'Argonne, cours de la Somme y cours de la Marne, se caracteriza por su obelisco y por un elemento histórico que imponente, la puerta de Aquitania.

El lugar se haya bien conectado por varias paradas de autobús y por la línea B de tranvía, y es uno de los lugares de reunión más populares entre los estudiantes. Aquí tienen lugar numerosos eventos a lo largo del año, sobre todo al caer el sol, momento en el que los músicos callejeros acuden a ofrecer su música a las terrazas de los numerosos bares y restaurantes. El mejor momento para rodearse del ambiente más animado en esta zona es durante el festival de música y los días en los que hay partido de fútbol.

El Marché des Capucins es el mercado de alimentos y flores más grande de Burdeos. Conocido como "la barriga de Burdeos", sus puestos se distribuyen en un recinto cubierto y entre ellos van y vienen los bordeleses para comprar a los jardineros, ganaderos, carniceros, agricultores de ostras y comerciantes de vino local. Los lugareños se refieren afectuosamente a este lugar como el "Capu", y comprobarás que se trata de un rincón con una vidilla muy peculiar en el que podrás llenar la cesta de buenos productos de la zona, disfrutar de un café o probar unas ostras.

El mercado de los Capuchinos está situado en la explanada homónima, entre la plaza de la Victoria y la iglesia de la Santa Cruz, y a diez minutos andando desde la estación de tren de Saint-Jean. También llegan hasta este famoso lugar histórico varias líneas de autobús. Si vienes en coche, puedes dejarlo en el aparcamiento de la planta superior.

El lago de Burdeos te permite disfrutar de un ambiente veraniego gracias a una agradable playa de arena y a una excelente oferta de deportes acuáticos. Está ubicado en la orilla izquierda del Garona a su paso por el Boulevard Chaban-Delmas de Bruges, al norte de Burdeos, y su playa es un lugar de relax y ocio a solo 15 minutos del corazón de la ciudad en la línea C del tranvía.

En verano, puedes disfrutar de un pícnic bajo los pinos y darte un chapuzón en las zonas de baño vigiladas. Se trata de un lugar muy popular entre los bordeleses, que vienen hasta aquí escapando del bullicio urbano para rodearse de los placeres estivales sin necesidad de conducir muy lejos. Además de relajarte o disfrutar de los deportes de playa, también encontrarás un amplio abanico de actividades disponibles en los meses de verano: minigolf, rocódromo o tenis de mesa, para que puedas pasar un día perfecto sin gastar un solo euro.

Cada primer domingo del mes, varios museos de Burdeos ofrecen acceso gratis. Si te gusta el arte, es una oportunidad estupenda para examinar la colección del Museo de Arte Contemporáneo, conocido localmente como "centro de artes plásticas contemporáneas" o "CAPC". Muy cerca de allí se encuentran otros dos imprescindibles, el Museo de Bellas Artes y el MADD, el Museo de Artes Decorativas y Diseño.

Sin salir del barrio, también te recomendamos el Centre Jean Moulin, dedicado a la Segunda Guerra Mundial. Para conocer todas sus colecciones y otras instituciones municipales a precios reducidos durante todo el año, puedes adquirir el llamado "Pass Musées Bordeaux" en las taquillas. Así podrás disfrutar de acceso gratuito e ilimitado vayas cuando vayas.

La Maison du Vin de Bordeaux, o "Casa del Vino de Burdeos", es uno de esos lugares que hay que visitar sí o sí en un viaje a este destino francés. Aquí podrás conocer muchos detalles sobre las variedades locales de uva y grand crus. El centro es perfecto tanto para quienes empiezan en este fascinante mundo como para los apasionados veteranos. Quizá quieras aprovechar para tomar una copa en la bodega, la cual ofrece excelentes vinos reserva a precios muy económicos. Además, su personal te aconsejará y guiará según tus preferencias.

Si quieres profundizar en tu experiencia y tus conocimientos, te recomendamos apuntarte a un curso en la escuela del recinto: podrás elegir entre sesiones introductorias por unos treinta euros hasta talleres para niveles más avanzados. Comprobarás que tienen opciones para todos los gustos que se adaptan al tiempo de que dispongas y, por supuesto, a tu presupuesto. En verano suelen ofrecer clases introductorias breves a precios aún más bajos. La Casa del Vino se esconde en el interior de un espectacular edificio del siglo XVIII muy cerca de la plaza des Quinconces.

La Orchestre d'Harmonie de Bordeaux es una iniciativa que tiene como objetivo dar a conocer las obras musicales al público general. Para ello se organizan conciertos gratuitos en distintos eventos que tienen lugar a lo largo del año, tales como los Días del Patrimonio Europeo, la Fiesta de la Música y las ceremonias conmemorativas del 11 de noviembre y el 18 de junio.

La orquesta ofrece conciertos al aire libre en la catedral de San Andrés y en otros recintos, como el Teatro Fémina, situado detrás de la plaza del Parlamento. Con cerca de 50 músicos, estos recitales incluyen sinfonías, arias operísticas, bandas sonoras de películas y musicales con el fin de deleitar a todo tipo de melómanos. Si no reservas con antelación, te recomendamos llegar con tiempo a los conciertos que no son al aire libre para poder conseguir tu entrada gratis.