10 planes perfectos con niños en Burdeos

Si viajas con niños, no hay nada como participar en un juego de pistas para explorar Burdeos y su rico legado arquitectónico de la forma más divertida. Hay varias visitas disponibles que te permitirán recorrer la ciudad y pasarlo en grande al mismo tiempo. Podréis pasear por estrechas calles bordeadas de edificios de sillería, buscar los fascinantes mascarones decorativos en las distintas construcciones y poner en práctica vuestras habilidades de observación para resolver los enigmas en familia.

Hay distintas "búsquedas del tesoro históricas" entre las que elegir, cada una con una temática diferente. Algunas de ellas os trasladarán a la Edad Media, mientras que otras se centran en un barrio concreto u os llevarán de viaje por las calles en busca de símbolos de la ruta de peregrinación a Santiago de Compostela. Los recorridos más breves duran una hora y son gratuitos. Otras opciones pueden llevar hasta dos horas y cuestan unos pocos euros. Si quieres más información puedes acercarte al CIAP, el Centro de Interpretación de la Arquitectura y el Patrimonio, ubicado en la plaza de la Bolsa, y recoger los folletos correspondientes.

Si viajas a Burdeos en familia, un plan estupendo es llevar a los niños al parque Bordelais, donde podrán corretear, jugar y disfrutar de un espectáculo de marionetas. Ubicado en el elegante barrio de Caudéran, cerca del centro al otro lado del bulevar Wilson, se trata del espacio verde más grande de Burdeos. Te recomendamos acceder a él desde la entrada que va desde la Avenue Carnot hasta la Rue du Bocage para contemplar esta magnífica puerta decorada con el escudo de armas de la ciudad.

Comprobarás que el parque es un bonito lugar que incluye numerosos atractivos como diversas áreas infantiles protegidas, un tiotivo, un trenecito, puestos de refrigerios y un estanque con patos, cisnes y gallinetas que chapotean entre centenares de pececillos. El recinto acoge, incluso, un pequeño zoológico interactivo en el que los niños podrán acercarse a animales como pavos reales, cabras, pavos, cerdos o los curiosos burros autóctonos. Se trata de un rincón imprescindible en la ciudad para pasar un día perfecto en un entorno natural donde, además, podréis asistir a una auténtica tradición familiar local: el espectáculo de marionetas del guiñol más antiguo de Francia.

Si viajas a Burdeos en familia, te recomendamos un tranquilo paseo en barco por las aguas del río Garona. No siempre resulta sencillo recorrer la ciudad a pie con niños pequeños, por lo que esta actividad es una oportunidad estupenda de contentarlos a ellos y disfrutar también vosotros. Los papás podréis escuchar los comentarios a bordo mientras los pequeños dejan de tener motivos para quejarse de andar y andar.

Burdeos se construyó a orillas del Garona, por lo que sus aguas son muy importantes para la ciudad y la recorren de extremo a extremo. No faltarán las bellas vistas a los monumentos históricos. El festival fluvial Fête du Fleuve, que se celebra a finales de primavera en años impares, es una bonita celebración del Garona. ¿Te hemos convencido? Puedes elegir entre un crucero de una hora o de una jornada completa, este último con el almuerzo incluido, y, si tus hijos ya son más mayores, quizá quieras regalarles un recorrido guiado en piragua o surf de remo.

Cap Sciences es un museo de descubrimiento y entretenimiento que ofrece exposiciones y talleres en torno a la ciencia perfectos para niños de cualquier edad. El centro se inauguró recientemente en el interior de un antiguo almacén situado en el muelle de Bacalan, a orillas del río Garona y casi enfrente del puente Jacques-Chaban-Delmat.

Se trata del lugar ideal al que ir cuando el tiempo no acompaña. El recinto cuenta con dos salas de exposiciones, una zona para actividades y, en el piso superior, la sección "127°", más orientada a los mayores de 15 años. También se organizan distintos talleres por edades, ideales para disfrutar de un entorno de aprendizaje práctico y divertido a través de experiencias interactivas que se actualizan con regularidad. Los niños algo más grandes podrán aprovechar los recursos disponibles para hacer realidad sus proyectos y crear objetos con la impresora 3D o la cortadora láser. Como ves, es un plan perfecto para toda la familia, incluso si decidís repetir.

Darwin Éco-système es una amplia zona que combina distintas actividades de ocio en un ambiente de libertad y creatividad. Ubicado en el muelle des Queyries, junto al río Garona, el recinto hace especial hincapié en la cultura urbana y acoge a artistas callejeros que acuden a mostrar su talento en el Caserne Niel y en la pista cubierta de skate. Quizá quieras traer a los niños para que puedan contemplar la belleza moderna del arte callejero y ver las piruetas de los skaters. Si les apetece practicar un poquito este deporte, podéis adquirir pases de un día.

Las instalaciones también ofrecen diversos restaurantes para toda la familia, como l'Epicerie Bio du Magasin Général Darwin, una gigantesca tienda de productos orgánicos con una peculiar decoración de estilo cajón de sastre, o Les Chantiers de la Garonne, donde podrás sentarte con los pies en la arena y contemplar vistas del río y de la ciudad más allá. Darwin Éco-système es una zona única de Burdeos que resulta ideal para pasar una jornada inolvidable con los tuyos.

¿Planeas un viaje a Burdeos en familia? Entonces quizá quieras llevar a los niños a Patinoire de Mériadeck para que disfruten patinando o incluso montando en karts sobre el hielo. Esta pista olímpica está situada en Cours Maréchal-Juin, en el distrito de Mériadeck, muy cerca de la bolera y del centro comercial. Podrás acceder muy fácilmente desde el centro, ya que cuenta con paradas de autobús y de la línea A de tranvía, y, si eliges el coche, puedes dejarlo en el aparcamiento 8 mai 1945, a solo 100 metros del recinto.

Una vez allí, puedes alquilar los patines y los cascos para los más pequeños. Eso sí, en las temporadas de mayor afluencia lo recomendable es traerse el propio casco de bici o esquí, por si no queda ninguno disponible cuando llegues. Quizá quieras aprovechar para asistir a uno de los espectáculos sobre hielo o a un partido de hockey del equipo local, los Bordeaux Boxers.

El Museo de Historia Natural de Burdeos acoge muestras de fósiles y esqueletos, así como animales disecados organizados según el hábitat y el continente. El edificio se encuentra en el jardín público, cerca de la plaza des Quinconces, y cuenta con otra entrada más en la plaza Bardineau. El tema central de sus exposiciones gira en torno a la interacción entre el hombre y la naturaleza, y en ellas podrás ver distintas especies locales y exóticas repartidas en tres pisos. También encontrarás terminales multimedia por todo el museo, y no pierdas la oportunidad de asistir a los distintos espectáculos que se organizan a distintas horas del día en la galería principal.

Si tienes alguna duda o pregunta, puedes hacérsela al personal de las salas. En la planta baja, el Museo de los Primeros Años está dirigido a niños de menos de seis años. Por último, también te recomendamos consultar el calendario de los talleres que se celebran con regularidad, en los que los pequeños podrán descubrir el museo de forma divertida y aprender siguiendo un sendero con preguntas sobre las distintas especies que se exponen.

En el zoológico de Burdeos-Pessac lo primero que llama la atención es la enorme variedad de flora y fauna que acoge. Se trata de un lugar que se caracteriza por su toque humano, y es un plan perfecto para un día en familia. Durante el paseo, podrás contemplar la majestuosidad de los grandes felinos y ver cómo a tus hijos se les ilumina la cara al llegar a los pandas rojos, los walabíes o los lémures a través de un trayecto que constituye un divertido laberinto. Te recomendamos acudir a los recintos a la hora de comer para ver cómo se alimentan las distintas especies, ya que es uno de los momentos más populares de la visita. También hay otros eventos programados, como el espectáculo de aves.

Puedes consultar los horarios en el tablón situado a la entrada. El zoológico también ofrece la oportunidad de convertirse en cuidador durante un día y acercarse de verdad a los animales para conocer un trabajo maravilloso con el que sueñan muchos niños. Para llegar a esta fascinante atracción debes dirigirte a la comuna de Pessac, a unos 25 minutos en coche al suroeste de Burdeos.

Si viajas a Burdeos pero no te da tiempo a acercarte a la costa atlántica para practicar sobre tu tabla, en Wave Surf Café, ubicado en el centro de la ciudad, podrás quitarte el deseo. Este bar temático te invita a probar una sesión de surf a cubierto en el interior del Residhotel Galerie Tatry, situado en Cours du Médoc, en el animado distrito de Chartrons. El establecimiento resulta perfecto para probar este deporte o el bodyboard en las condiciones controladas y seguras de una máquina de olas artificiales antes de sumergirte en las aguas de la costa de Plata.

Contarás con la ayuda de un instructor para subirte a tus primeras olas en un ambiente muy relajado. ¿No te apetece mojarte? Siempre puedes dejar que los niños se diviertan en el agua mientras tú disfrutas de un café o un aperitivo en el bar. Se trata de una actividad muy divertida para niños mayores de seis años.

La casa ecociudadana, o Maison écocitoyenne, de Burdeos ofrece información e iniciativas para llevar una vida más sostenible. Se halla situada en el muelle Richelieu, enfrente de la puerta de Cailhau. Sus "habitantes" organizan distintos talleres para ayudar a las familias a fomentar la biodiversidad, dejar de generar residuos y comprar alimentos y moda sostenible y responsable. Podrás, por ejemplo, aprender a coser o a producir cosméticos y otros artículos domésticos que sean respetuosos con el medio ambiente, así como a fabricar y reparar distintos objetos.

En la casa ecociudadana de Burdeos también organizan paseos guiados por la ciudad para animar a sus habitantes a cuidar la naturaleza de la zona. Quizá quieras consultar la programación y apuntar a los niños a un taller práctico para que puedan descubrir o conocer mejor aquellas actividades que ayudan a proteger el planeta.