10 planes para disfrutar de Valencia en familia

A solo diez kilómetros de Valencia se encuentra el parque natural de La Albufera, un espacio protegido con gran diversidad de vegetación y fauna, entre la que destacan las aves acuáticas. En el centro del parque encontrarás la mata de l’Antina, un gran lago que podrás surcar gracias a los distintos paseos en albuferenc (una barca tradicional) que se suelen ofrecer en la zona. Los paseos acostumbran a durar unos 45 minutos y puedes combinarlos con otras actividades, como recorridos en 4x4 o una buena paella en un restaurante típico. No en vano La Albufera es el lugar donde se inventó el plato valenciano por excelencia. En definitiva, una excursión familiar a La Albufera es el plan perfecto para pasar el día en medio de la naturaleza sin alejarse de la ciudad. Desde el centro de Valencia, podréis coger el autobús 25 y, en menos de una hora y por solo 1,5 EUR el trayecto, estaréis en vuestro destino.

Como decía aquel, el saber no ocupa lugar. Así que ¿por qué no reservas un hueco en la agenda de tus vacaciones familiares en Valencia para visitar el Museo de los Soldaditos de Plomo? espacio, conocido como L'Iber, alberga una espectacular colección de más de 95 000 piezas que incluyen soldaditos de plomo, por supuesto, pero también dinosaurios, personajes cinematográficos, protagonistas de cómics, pintores célebres y mucho más. Este peculiar museo, que muestra colecciones permanentes y algunas temporales, está situado en el palacio gótico de Malferit, muy cerca de la catedral de Valencia. Nada mejor para pasar una mañana con toda la familia admirando estas increíbles miniaturas y, por qué no, aprendiendo un poco de historia.

El Bioparc València es un espacio de 100 000 m2 de superficie en el que se recrean diversos hábitats naturales de todo el mundo e incluye tanto especies vegetales autóctonas como fauna salvaje. Los niños disfrutarán de lo lindo viendo un montón de animales campar a sus anchas en un lugar que ha sido ideado teniendo en mente su bienestar, por lo que reproducen los comportamientos naturales que tendrían en libertad. Además, dentro del parque hay un restaurante que ofrece menús a los visitantes con opciones para celíacos. No lo dudes y acércate a Bioparc València para disfrutar de una experiencia única con toda la familia durante tus vacaciones.

El Miguelete (o Micalet, en valenciano) es como se conoce a la torre campanario de la catedral de Valencia. Es originaria del año 1381 y, en un principio, era independiente de la catedral, aunque al final acabaron juntándose debido a una ampliación del templo. De base octogonal, esta torre de estilo gótico valenciano tiene 51 metros de altura. Si subes a lo más alto por la escalera de caracol, obtendrás unas vistas de Valencia que te dejarán con la boca abierta. Y, por si te habías preguntado de dónde procede este curioso nombre, se debe a que en la parte más alta se encuentra la campana dedicada a san Miguel, santo que tenía la obligación de proteger Valencia de tormentas y otros males. Curioso, ¿verdad?

El parque Gulliver, situado en el antiguo cauce del río Turia, es quizá una de las atracciones más curiosas que ofrece la ciudad de Valencia. Se trata de un gran parque infantil de 6,1 hectáreas en cuyo centro se encuentra una impresionante escultura monumental de Gulliver, personaje protagonista de Los viajes de Gulliver, del escritor irlandés Jonathan Swift. En la escultura hay numerosos toboganes para que niños (y no tan niños) se deslicen por ellos y está hecha de tal forma que, al pasar por encima de ella, los visitantes parecen los habitantes de Lilliput cuando caminaban por encima del cuerpo de Gulliver. Además de a este simpático personaje, en el parque encontrarás una frondosa vegetación, más juegos infantiles y pistas de minigolf y monopatín. Vamos, que la mañana o la tarde de diversión en familia está asegurada.

Es difícil pensar en Valencia sin que te venga a la cabeza la Ciudad de las Artes y las Ciencias. Este complejo arquitectónico, cultural y de entretenimiento, obra del valenciano Santiago Calatrava (entre otros), acoge tal diversidad de exposiciones interactivas, tanto permanentes como temporales, que es casi imposible no encontrar algo del agrado de adultos y niños. De hecho, se organizan infinidad de actividades dirigidas a los peques de la casa para que se diviertan aprendiendo. Por si esto fuera poco, la Ciudad de las Artes y las Ciencias incluye un cine IMAX, L’Hemisfèric, y el mayor acuario de toda Europa, l’Oceanogràfic.

L'Oceanogràfic de Valencia, situado dentro de la Ciudad de las Artes y las Ciencias de la ciudad, reproduce fielmente los más importantes ecosistemas marinos del planeta dentro de sus descomunales tanques y acuarios. Acércate con toda la familia a este singular espacio interactivo y vive una experiencia única contemplando de cerca montones de especies marinas y visitando sus exposiciones, como la exposición permanente de medusas. Te alegrará saber que l'Oceanogràfic cuenta dentro de sus instalaciones con un restaurante situado bajo el agua, por lo que tú y los tuyos podréis comer o cenar rodeados de bancos de peces pululando de un lado para otro. Os parecerá estar viviendo un sueño, ya lo verás.

Por supuesto, no podíamos acabar este artículo sin hacer referencia a las Fallas, la fiesta tradicional valenciana declarada Patrimonio Inmaterial de la Humanidad por la Unesco. El antiguo convento de San Vicente de Paúl fue el lugar escogido para inaugurar en 1971 el Museo Fallero de Valencia; de hecho, el museo aún conserva partes de la antigua estructura del convento. Aquí podrás conocer la historia y la evolución de una tradición valenciana como pocas. ¿Sabías que cada año se elige por votación popular una figura de las Fallas que se salvará de la quema? Son lo que se conoce como ninots indultats, y podrás verlos en el museo, además de carteles anunciadores de las Fallas, retratos de las falleras mayores, recompensas e insignias de las comisiones falleras, y muchos objetos curiosos más. ¡Seguro que los más pequeños pasan un buen rato entretenidos eligiendo su ninot favorito!

Si antes hablábamos del plato valenciano por excelencia, la paella, tampoco podemos dejar de hablar de su bebida más emblemática: la horchata. Varios operadores turísticos organizan visitas guiadas por el municipio valenciano de Alboraya, considerado como la cuna de la horchata de chufa. Durante estos recorridos se visitan plantaciones y secaderos de chufas (tubérculo que ha dado lugar a la denominación de origen Chufa de Valencia), y se hace un itinerario por algunas horchaterías tradicionales. Además, muchas de estas visitas culminan con un taller para aprender a preparar esta deliciosa bebida, seguido de una degustación con fartons, un bollo alargado típico de Alboraya que se moja en la horchata. ¿Se te ocurre un plan más divertido y original que hacer en familia?