8 actividades en Edimburgo durante el invierno

El verano es la mejor época del año para recorrer Edimburgo; gracias a sus casi 18 horas de luz solar diarias, los largos paseos para disfrutar de las vistas de la ciudad están garantizados. Quienes tengan ganas de hacer una señora excursión pueden subir por los escarpados Salisbury Crags de Holyrood Park hasta el Arthur's Seat, un famoso volcán inactivo con vistas panorámicas. Muy cerca de allí está Calton Hill, que cuenta con varios monumentos en lo alto, incluida la acrópolis inacabada que empezó a construirse como Monumento Nacional de Escocia.

Desde el centro de la ciudad, también puedes tomar el sendero Water of Leith, que serpentea junto al río a través de los pueblos de Dean y Stockbridge hasta desembocar en el fiordo de Forth, en Leith. Eso sí, elijas la ruta que elijas, no salgas del hotel sin gorra, protector solar y una chaqueta. ¡El clima es imprevisible!

Descubre la cultura de las Tierras Altas en esta prestigiosa feria agrícola que se celebra desde 1822. Los mejores perros pastores corren alrededor de sus rebaños mientras los jueces inspeccionan el ganado para elegir al ganador. A los niños les encantarán el parque infantil, con un tractor gigante, y los desfiles repletos de estrellas de cuatro patas.

Aunque en el pasado Leith era una zona de muelles sin mucho encanto, esta parte del norte de Edimburgo ha experimentado recientemente un lavado de cara. En las tardes de verano, da un paseo junto al mar y elige un restaurante de especialidades de pescado para cenar al aire libre o tomar un cóctel mientras el sol se pone sobre las aguas del fiordo de Forth.

El Real Jardín Botánico de Edimburgo, fundado en 1670, muestra su cara más florida en verano. El Queen Mother's Memorial Garden está dividido en cuatro zonas que comprenden distintas partes del planeta y con plantas originarias de Asia, Europa, Norteamérica y el hemisferio sur. Consulta los eventos especiales de verano, como los recorridos guiados por horticultores expertos y los cursos de dibujo botánico.

Los jardines de Princes Street son la fina línea que separa la Old Town de la New Town y constituyen un tranquilo oasis, incluso en la frenética temporada de festivales. Para organizar un pícnic de lo más lujoso, compra algo de comer en el mercado de Princes Street y elige un sitio junto a los locales que se toman un descanso para almorzar aquí. Más al sur encontrarás The Meadows, una enorme superficie verde muy popular entre los estudiantes de las facultades cercanas y salpicada de discos voladores, pelotas y carriles para las bicicletas.

Las gaitas y los bailes de las Tierras Altas son los protagonistas de este espectáculo en el castillo de Edimburgo, pero no te creas que solo verás gaiteros, kilts y uniformes militares. Las exhibiciones de paracaidismo y los artistas de 40 países asombran al público, mientras la actuación estrella del espectáculo, el solo de gaita de Sleep Dearie Sleep, suena desde las murallas del castillo.

Este descomunal evento de tres semanas de duración es uno de los festivales artísticos más grandes del mundo. No esperes para reservar una entrada a los espectáculos de los artistas conocidos y no te pierdas el desfile inaugural del festival, protagonizado por más de 150 motos, carrozas y bandas. Junto a él, se celebran otros innumerables festivales, incluido el Festival Fringe de Edimburgo, donde triunfan el teatro más arriesgado y la comedia contemporánea.

En agosto, la West End Fair reúne a casi 100 expositores que venden artículos únicos de joyería, moda y artesanía contemporáneas. En la Royal Mile encontrarás tartán en todas sus formas y las mejores marcas de whisky de malta. Echa un vistazo a las tiendas de segunda mano de Stockbridge para llevarte una prenda o un accesorio original, y aprovecha las rebajas de verano de los mejores comercios de Princes Street, que abren hasta tarde los jueves.