11 actividades para hacer en Nantes en un día

El barrio de Bouffay, ubicado a 250 metros al oeste del castillo de los duques de Bretaña, es la zona más antigua del centro de Nantes. Este barrio peatonalizado cuenta con numerosas callejuelas pintorescas que vale la pena visitar, muchas de las cuales nacen en la plaza de adoquines de Bouffay, un lugar de lo más agradable para comer o simplemente tomar algo en la terraza de cualquiera de sus cafeterías y restaurantes. En el barrio de Bouffay también podrás comprar de todo, desde ropa y calzado hasta teléfonos móviles y mucho más.

La construcción más destacada de Nantes es, sin lugar a duda, el castillo de los duques de Bretaña. Esta fortaleza de estilo renacentista ubicada en pleno centro de la ciudad, a escasa distancia a pie de la estación de tren, alberga en la actualidad el Museo de Historia de Nantes. Los artefactos antiguos y las modernas instalaciones multimedia te permitirán descubrir la historia de Nantes y de la región de manera entretenida y educativa. Además, el castillo cuenta con siete torres unidas por una pasarela por la que se puede pasear y un divertido tobogán en uno de los laterales.

El mercado de Talensac es el más importante y el más grande de Nantes. Se encuentra cerca del centro y alberga más de 200 puestos repartidos en tres secciones diferentes: una cubierta, una semicubierta y una al aire libre. Aquí encontrarás prácticamente de todo, desde fruta y verdura hasta carne y pescado, e incluso prendas de vestir y productos artesanales. Los domingos son los días más animados en el mercado de Talensac. Es un lugar que atrae tanto a turistas como a los lugareños por la calidad de sus comestibles y sus platos listos para el consumo.

La región de Nantes es famosa por producir vinos blancos refrescantes y de cuerpo ligero, como el Muscadet y el Gros Plant. Un local agradable para degustar estas marcas regionales es La Comédie des Vins, ubicado en la rue Suffren, en pleno centro de Nantes. Se trata de una vinoteca sin pretensiones que suele estar abarrotada debido a su impresionante oferta de vinos de primera, que puedes acompañar con tapas o quesos. Si tienes alguna duda, no dudes en consultar a los camareros, ya que saben muchísimo de vinos y es evidente que les apasiona su trabajo.

En la rue de la Fosse, en pleno corazón de Nantes, se encuentra el Passage Pommeraye, una calle comercial cubierta construida a mediados del siglo XIX. Su elegante estilo renacentista y las magníficas escaleras de mármol, las estatuas y la cubierta de vidrio le han valido la categoría de monumento histórico. En sus tres niveles, el Passage Pommeraye alberga más de 25 tiendas de ropa, accesorios, perfumes y joyas, todas ellas acordes con el ambiente de glamour que impregna el lugar. 

Da rienda suelta al niño que llevas dentro en las Máquinas de la isla de Nantes. Este proyecto artístico y cultural inspirado en las novelas de Julio Verne, los inventos visionarios de Leonardo da Vinci y la historia industrial de Nantes conseguirá que te adentres en un auténtico mundo de fantasía. El Gran Elefante mecánico es el protagonista indiscutible del complejo, pero también merece la pena visitar la galería de máquinas, con un verdadero bestiario de aparatos gigantes que representan animales como una araña, una hormiga y una garza. Te aconsejamos que reserves con antelación por Internet la entrada al Gran Elefante para evitar las colas.

Ubicado en una antigua fábrica de galletas de la famosa marca LU, Le Lieu Unique es un complejo en el que se celebran espectáculos de diversas disciplinas del arte contemporáneo, desde música y teatro hasta literatura y pintura. Además de exposiciones de arte y eventos, en Le Lieu Unique encontrarás un bar, un restaurante, un hammam, una guardería, una librería y una tienda de regalos. Con su curiosa mezcla de culturas y estilos, es un lugar ideal para conocer a personas de todas partes en un ambiente a la última moda.

El jardín de las Plantas es un oasis verde situado cerca de la entrada norte de la estación de tren de Nantes, en pleno corazón de la ciudad. Ocupa una superficie de más de 70 000 metros cuadrados, con 800 metros cuadrados de invernaderos en los que se puede contemplar una colección impresionante de orquídeas africanas y asiáticas. Con sus más de 11 000 especies de plantas y flores dispuestas en torno a canales y estanques, y sus bonitas estatuas, fuentes y un gran parque infantil, el jardín de las Plantas ofrece un entorno inmejorable para desconectar del bullicio del centro de Nantes.

La catedral de Nantes es un impresionante punto de referencia de estilo gótico flamígero situado cerca del centro de la ciudad, 150 metros al norte del castillo de los duques de Bretaña. Aunque su construcción comenzó en el siglo XV, no se completó hasta finales del siglo XIX. La catedral no solo impresiona por su arquitectura y su gran tamaño, sino por la magnífica tumba de Francisco II de Bretaña y Margarita de Foix, padres de Ana de Bretaña, y la cripta del siglo XI en la que se muestra una exposición permanente sobre la historia de la catedral.

El restaurante La Cigale es uno de los más antiguos de Nantes. De hecho, está considerado un monumento histórico debido a su arquitectura y su decoración Art Nouveau de 1895, año en que se inauguró. En este local del centro de la ciudad, situado en la plaza Graslin, encontrarás una variada carta de platos típicos franceses, incluido pescado y marisco frescos del océano Atlántico, a tan solo 60 kilómetros de distancia. Todo en este restaurante es de primera, ya sean las vieiras, las ostras, los langostinos o el bacalao, y no hay nada como acompañar la comida con un buen vino local, en concreto Muscadet.

Le Nid es un bar lleno de glamour que se encuentra en la azotea de la torre Bretagne, desde donde se pueden contemplar unas vistas de 360 grados de la ciudad a una altura de 144 metros. Esta imponente torre del centro de la ciudad, situada a 550 metros al oeste de la catedral de Nantes, cuenta con una terraza panorámica que se puede visitar por el módico precio de un euro. Sin embargo, si quieres aprovechar al máximo la visita, te aconsejamos que te tomes una copa en Le Nid, el elegante bar de la planta 32 de la torre. Los jueves también puedes asistir a eventos musicales con pinchadiscos y los domingos, a conciertos en directo.