12 cosas que hacer en Niza

El paseo marítimo de los Ingleses discurre a lo largo de 5 kilómetros de costa mediterránea, entre el aeropuerto de Niza y Quai des États-Unis, se encuentra bordeado de palmeras y está repleto de vida. Es un sitio perfecto para sentarse y contemplar la costa o para observar a la gente que viene a pasear, correr, montar en bicicleta, patinar o deslizarse en monopatín.

Lo verás también adornado con obras de arte. Siéntate en uno de los famosos bancos azules o visita una estación Vélo Bleu para alquilar una bici. También encontrarás una excelente oferta de bares y restaurantes en la misma playa. Para alojarte, quizá quieras sentirte como la realeza reservando en algunos de los hoteles más lujosos de Francia.

El casco antiguo de Niza, o Vieux Nice en francés, se encuentra en el extremo este de la bahía de los Ángeles, entre los jardines de Alberto I y la colina del Castillo. Con románticas callejuelas adoquinadas, antiguas casas de tejado rojo y lugares emblemáticos, como la Ópera de Niza y el palacio Lascaris, esta zona te transportará al siglo XVIII.

También es famosa por sus pintorescos restaurantes y animados locales nocturnos. Durante tu paseo, no olvides buscar la heladería Fenocchio, en el número 6 de la calle De la Poissonnerie, pues sus helados tienen fama de ser los mejores de la ciudad.

En Villefranche-sur-Mer, a 15 minutos en coche de Niza en dirección este, se encuentra la playa de Marinières, un lugar muy popular, sobre todo de mayo a septiembre. A diferencia de otras muchas franjas de la zona, esta es pública y gratis.

Las playas frente a Niza son de piedrecitas, pero no es el caso de Marinières. Aquí no hay arena, sino guijarros muy pequeños que le dan aspecto de postal. Encontrarás una variada oferta de bares y restaurantes cerca, bastante práctica si no has traído pícnic.

Las bellas iglesias de Niza exhiben una rica historia y una arquitectura magnífica, lo que las convierte en visita obligada. Muchas de ellas están en el casco antiguo, pero encontrarás iglesias impresionantes por toda la ciudad. La catedral de Santa Reparata es una de las más notables y data del siglo XII.

La catedral ortodoxa rusa de San Nicolás es otra impresionante construcción con bonitos minaretes y torrecillas de colores de la tradición arquitectónica rusa que destaca en la ciudad. Otros templos notables son la capilla del Santo Sepulcro, en la plaza Garibaldi, la capilla del Santo Sudario, en Cours Saleya, y la capilla de la Misericordia, en Cours Saleya.

Niza ofrece una serie de playas preciosas en sus alrededores.La playa Azul es un arenal privado en el Paseo de los Ingleses que abre todo el año. Aquí podrás practicar parasailing, wakeboard o esquí acuático antes de acudir a un restaurante de pescado o a un bar de moda. A los lugareños les gusta visitar La Réserve, una diminuta playa pública menos conocida al este de la ciudad. Es de guijarros, así que asegúrate de llevar cangrejeras.

Si viajas con niños, Le Voilier es ideal para pasar el día. Esta amplia franja de grava fina tiene agua azul clara y olas suaves. Es mitad pública y mitad privada; la parte privada incluye hamacas, restaurante, duchas de agua caliente y un parque infantil.

El parque del Monte Boron cuenta con 11 km de rutas de senderismo, un circuito de ejercicio de 1,5 km, zonas de picnic y campos de petanca rodeados de un bosque mediterráneo. Como ves, tiene todo lo que necesitas para pasar un día perfecto.

Lo más destacado del parque del Monte Boron es el impresionante fuerte del Monte Albán, del siglo XVI. Ofrece impresionantes vistas del puerto de Niza al oeste, así como de Villefranche-sur-Mer y la península de Saint-Jean-Cap-Ferrat al este. Se tardan unos 45 minutos de caminata en llegar desde el casco antiguo, pero también puedes ir en autobús.

El Museo Nacional Marc Chagall, además de acoger la mayor colección del mundo de obras de este artista ruso (bielorruso según la ordenación geopolítica actual), es un recinto muy animado. Alberga un pintoresco bar-restaurante en el jardín, una sala para conciertos de música clásica y un cine que proyecta películas sobre la vida de este polifacético artista. 

Se encuentra en la avenida Dr. Ménard, en el centro de Niza, e incluye la serie de 17 cuadros del artista sobre temas bíblicos. Se ofrecen visitas guiadas, así como sesiones interactivas y creativas para niños.

La Colina del Castillo, o Colline du Château, es el punto más alto de Niza, con 92 metros, y se encuentra al este del casco antiguo. Puedes subir mediante un bonito ascenso a pie, en el cómodo ascensor o en el pintoresco minitren.

En la cima verás las bonitas ruinas de un castillo, una gran cascada artificial, un cementerio histórico y un acogedor café. La Colina del Castillo ofrece una deslumbrante panorámica de la ciudad y de la bahía de los Ángeles al oeste, y del puerto al este. El parque es un lugar agradable para pasear e incluye una zona de juego infantil.

La bulliciosa avenida Jean Médecin se extiende entre la plaza Massena, al norte del casco antiguo, y la estación de tren de Niza, y es la vía comercial más animada del centro. Ocupa más de 900 metros y cuenta con amplias aceras y establecimientos comerciales de todo tipo, desde boutiques hasta centros comerciales, grandes almacenes y supermercados. 

La selección incluye marcas internacionales como H&M y Zara, y boutiques modernas con artículos y recuerdos únicos. También podrás disfrutar de deliciosas experiencias culinarias, desde cafés franceses hasta restaurantes exclusivos. Cuidado al cruzar la avenida porque pasan tranvías.

El Museo Matisse de Niza presenta una amplia colección de pinturas, dibujos, esculturas y fotografías realizados por Henri Matisse, destacado artista fauvista francés. Está ubicado en la hermosa Villa des Arenes, una construcción del siglo XVII situada en Cimiez, en Niza.

Matisse y sus herederos también donaron muchas obras al museo, por lo que ahora acoge una amplia colección de pinturas y gouaches, dibujos y grabados, esculturas y fotografías. También verás objetos propiedad del artista, como cerámicas, vidrieras y documentos. Algunas de las obras más famosas expuestas en el museo son Mujer leyendo, La alegría de vivir, Desnudos azules y Armonía en rojo.

El parque Fénix es un asombroso jardín botánico y zoo que también acoge el Museo de Artes Asiáticas de Niza. Su edificio piramidal es uno de los mayores invernaderos de Europa, y contiene climas tropicales diferentes con enormes palmeras, mariposas exóticas y flamencos rosas, entre otras maravillas. El parque Fénix te lleva por más de 20 jardines temáticos y ofrece encuentros con muchos animales exóticos, como canguros, cocodrilos, caimanes y muchos más.

También es genial para los niños, gracias a una amplia zona de juegos infantiles.

En el mercado Cours Saleya, conocido en el ámbito local como el mercado de las Flores de Niza, además de flores también encontrarás deliciosas frutas y verduras expuestas en bonitos expositores. Asimismo, podrás comprar miel casera, jabones hechos de manera artesanal y otros productos.

Se encuentra en Cours Saleya, entre el casco antiguo y la playa, y es el lugar perfecto para probar productos locales frescos e interactuar con los simpáticos vendedores que atienden los puestos. Un plato imprescindible aquí es la socca. Este apetitoso pan plano de garbanzos es una exquisitez local que puedes encontrar en Chez Thérésa, un puesto que lleva aquí desde los años veinte.