Diez cosas que hacer en Burgos en un día

La plaza Mayor es el punto de reunión más popular de Burgos. Ocupa un área de unos 6000 metros cuadrados con una forma casi hexagonal y está rodeada de tiendas, bares y restaurantes. Tómate un café tranquilamente en una de las terrazas mientras observas a la gente pasar. Gracias a su céntrica ubicación en el casco antiguo de Burgos, la plaza Mayor es un punto de partida ideal para explorar el barrio histórico. Los hoteles más recomendados de la ciudad se encuentran en la zona de la Plaza Mayor.

Conocida oficialmente como la catedral de Santa María de Burgos, se trata de una construcción del siglo XIII que ha sido declarada Patrimonio de la Humanidad por la Unesco. Lo mejor es hacer la visita con audioguía para aprender más sobre este edificio de estilo gótico mientras admiras sus espléndidas ornamentaciones y sus refinadas tallas de piedra. Además, no puedes perderte el lugar de sepultura del Cid. Te recomendamos que cojas algo de abrigo, ya que dentro de la catedral hace un poco de frío.

El casco antiguo de Burgos está formado por un laberinto de calles peatonales adoquinadas que se cruzan con varias plazas. Además de la gran cantidad de tiendas, restaurantes y bares de tapas, esta zona está repleta de lugares de interés histórico, como la Casa del Cordón, el paseo del Espolón y la iglesia de San Nicolás, entre muchos otros. Déjate invadir por la relajante atmósfera mientras paseas por las calles inmaculadas del casco antiguo.

El Museo de la Evolución Humana está ubicado en un moderno edificio en la orilla sur del río Arlanzón. A medida que subas por las plantas de este museo, sentirás como si avanzaras en el tiempo mientras descubres cómo ha evolucionado la humanidad. Puedes coger una audioguía en la taquilla para conocer más detalles sobre nuestros ancestros, desde el Homo antecessor hasta el Homo sapiens.

Si quieres probar productos típicos de la zona, Casa Quintanilla es lo que buscas. Te sentirás como si hubieras viajado al pasado en cuanto entres en esta tienda, que fue establecida en 1880 en la calle Paloma, a un paso de la plaza Mayor. En ella puedes comprar morcilla o el famoso queso fresco de Burgos, además de una amplia gama de vinos, aceites y embutidos de la zona. Si te gusta el dulce, no puedes irte sin probar el chocolate de Quintanilla.

El monasterio de Santa María la Real de las Huelgas, fundado a finales del siglo XII, pertenece a la congregación cisterciense. Este edificio, declarado Bien de Interés Cultural, alberga un museo dedicado a las telas medievales, varias tumbas reales y un ejemplar único de un manuscrito musical del siglo XIV. Únete a una visita guiada para conocer los interesantes detalles históricos del recinto mientras te empapas de la serena atmósfera atemporal que se respira. La oferta de alojamientos cercanos al monasterio es bastante amplia, así que compara y elige el que más te guste. 

Si quieres regalar una pieza única de joyería o simplemente te quieres dar un capricho, visita la tienda Jorge Revilla en la calle Paloma. Esta pequeña tienda se encuentra justo al lado de la catedral de Burgos, en el casco antiguo. Jorge Revilla es un conocido diseñador de joyas nacido en Burgos y sus colecciones de plata fina están inspiradas en el cruce de culturas que ha vivido España a lo largo de su historia.

El mirador del Castillo forma parte del castillo de Burgos. Esta pequeña torre circular, construida en la ladera de la colina sobre la que se encuentra dicho edificio, ofrece unas vistas impresionantes de Burgos y de sus monumentos más importantes. Está a solo 200 metros del casco antiguo, por lo que se puede llegar a pie sin problemas. Disfruta de la puesta de sol mientras tomas algo en La Ciudadela, el restaurante situado junto al mirador.

La cervecería Morito es uno de los restaurantes más populares de Burgos. Está situado justo al lado de la plaza Mayor y ofrece toda una selección de especialidades locales en un ambiente rústico. Entre otros platos, puedes probar la morcilla y el tradicional queso fresco de oveja de la región. Acompaña la comida de un delicioso vino local, como un Ribera del Duero. Además, tiene la ventaja de que los precios son bastante económicos. Si quieres un ambiente más tranquilo, pide una mesa en la segunda planta.

El casco antiguo de Burgos es ideal para tomar algo de noche. En la cervecería Flandes, en la calle Huerto del Rey, encontrarás una amplia selección de cervezas y sidras en un ambiente muy acogedor. Si te gusta la música rock, tu sitio es el Jarra'N'Heavy, en esa misma calle. Para un ambiente más discotequero, dirígete al Cooper Club, en la calle Fernán González. En este local se crea un ambiente muy agradable, con clásicos del New Wave y excelentes cócteles.