Los 10 lugares más terroríficos de Glasgow

El Real Teatro de Glasgow ostenta el prestigioso título de ser el más antiguo de la ciudad. Su historia se remonta hasta la década de 1860 y se encuentra en un lugar privilegiado: la animada Hope Street. Pero todos sus años de antigüedad también han dado pie a la aparición de algunas historias espeluznantes.

Abundan los testimonios de quienes aseguran haber escuchado golpes de nudillos en algunas puertas y crujidos en la tarima. De hecho, los actores que suben al escenario hoy en día son los primeros que hacen circular anécdotas sobre intérpretes y limpiadores fantasma que viven atrapados en el mundo de los vivos. Al margen de estas historias terroríficas, no cabe duda de que cuenta con un impresionante cartel de cautivadoras interpretaciones que te atrapará sin remedio. Seguro que encontrarás la propuesta que te hará vibrar de emoción, ya sea con la compañía nacional de ballet de Escocia o con los espectáculos operísticos.

La dirección y la gestión de la Pollok House están en manos del National Trust for Scotland. El edificio se encuentra en medio de un extenso terreno cercano a la zona de Shawlands, en la ribera sur del río Clyde. En su día fue el hogar de la poderosa familia Stirling-Maxwell, pero actualmente está abierta al público y la puedes visitar por tu cuenta o apuntarte a una visita guiada.

En su interior, podrás contemplar la decoración antigua y valiosos cuadros de artistas de la talla de Goya. Eso sí, si te encantan las historias estremecedoras, te invitamos a sumergirte en la de las llamadas "Brujas de Pollok". En el siglo XVII, cuando se extendió por todo el país una enorme fobia hacia las artes oscuras, se quemó vivas en este preciso lugar a varias mujeres acusadas de practicar magia negra. ¿Te toparás con alguno de sus espíritus?

El Scotland Street School Museum es una de las maravillas arquitectónicas más destacadas de Glasgow. El diseño corrió a cargo de Charles Rennie Mackintosh y luce su elegante estilo baronial escocés a muy poca distancia de la estación de metro de Shields Road. Eso lo convierte en uno de los lugares fantasmagóricos más accesibles de la zona situada al sur del Clyde.

En la actualidad, el edificio alberga un museo que describe cómo era la vida en una escuela de la era victoriana, pero, por supuesto, también cuenta con una cara espeluznante: los empleados del museo dicen haber sido testigos de cómo algunos objetos cambiaban de lugar sin que nadie los tocara, del eco inexplicable de una risa en las plantas superiores y de unos pasos en corredores donde aseguran que no había nadie. Dejamos en tus manos la decisión de si deseas visitar este escalofriante lugar.

Solo con ver el aspecto del Tron Theatre sabrás de inmediato que se trata de uno de los lugares más misteriosos y fantasmagóricos de Glasgow. Este edificio inquietante se encuentra en Trongate Road, cerca de Saltmarket, y en su fachada destaca una torre que recuerda al campanario de una iglesia con tallas de estilo gótico ennegrecidas.

En su interior se suelen representar producciones dramáticas y de comedia musical que han sido premiadas. Pero no podíamos limitarnos a esta faceta: debes saber que diversos médiums y expertos en lo sobrenatural no han podido evitar visitar este auditorio. Concretamente para investigar los informes de apariciones que se centran en el antiguo pub Vic Bar y en el teatro principal. En ellos se describen presencias "amenazantes" que ponen los pelos de punta.

Puede que el Cathedral House Hotel, situado en la cautivadora plaza Cathedral Square, sea ahora mismo una elegante opción de alojamiento tipo boutique, pero no siempre ha sido así. A finales del siglo XIX, este fue el hogar provisional de los presos que salían de la famosa prisión de Duke Street, probablemente la cárcel más dura de Escocia. Los presos denunciaban unas condiciones de vida terribles y se producían un gran número de ejecuciones.

Se rumorea que los espíritus de los antiguos convictos todavía pueden sentirse en el hotel. Algunos describen una presencia paranormal que les provoca la sensación de que alguien les tocara el brazo. Otros afirman haber escuchado gritos de niños jugando en las habitaciones del ático.

El Glasgow Royal Infirmary es un hospital universitario que sigue en funcionamiento. Presta servicio a la ciudad desde el amplio terreno del campus, justo al lado de la salida de la autopista M8 que conduce a la zona de la catedral. El edificio se construyó en el siglo XVIII, pero se le han añadido numerosos anexos y ampliaciones desde entonces.

Como era de esperar, en sus más de dos siglos de historia ha habido tiempo suficiente para experimentar distintos fenómenos naturales, todos ellos extraños y de diversa índole. Hay quienes hablan de un hombre que susurra en el pabellón 27 y que ha llegado a entablar conversación con pacientes enfermos. También se ha descrito la aparición de una dama vestida de gris y la de una monja espectral que flota por los pasillos.

El Kelvin Hall, un espacio polivalente en el que se celebran eventos de todo tipo, se encuentra junto al pulmón verde de la animada zona residencial de Woodlands, al oeste de Glasgow. El complejo lo frecuentan personas de todos los perfiles, desde estudiantes a familias, gracias a que combina exposiciones culturales e instalaciones deportivas.

El Kelvin Hall fue en su día sede del museo del transporte de la ciudad, antes de que lo trasladaran al Riverside Museum, situado más cerca del río Clyde. Durante ese tiempo, comisarios y visitantes afirmaban haber presenciado escenas escalofriantes en la reproducción de una calle adoquinada de estilo victoriano que formaba parte de la exposición. Eso por no hablar de las risas de niños procedentes del interior del museo que resonaban por la noche, cuando ya estaba cerrado.

Ninguna lista de los lugares más espeluznantes de Glasgow estaría completa sin la gran necrópolis de la ciudad. Este mar de lápidas y sepulcros se encuentra sobre una colina, entre las torres neogóticas del Glasgow Royal Infirmary y Duke Street, y la actividad paranormal no podía faltar aquí.

Una de las historias más destacadas es la del vampiro de la necrópolis de Glasgow. Allá por 1954, alguien vio a unos niños armados con estacas que observaban agazapados entre las tumbas. Cuando les preguntaron qué hacían ahí, explicaron que iban a cazar a un chupasangre de dientes afilados que hoy en día ya forma parte de la leyenda local. En la actualidad, se organizan visitas regulares al lugar para seguir las huellas de aquellos pequeños.

Tras la fachada con entramados de madera del The Scotia, situado en la calle Stockwell, los parroquianos disfrutan de potentes whiskies escoceses y espumosas cervezas en uno de los pubs con más historia de la ciudad. Los techos bajos, atravesados por auténticas vigas de madera, combinan con una barra de caoba y banderas con la cruz de San Andrés. No encontrarás nada más característico de Glasgow.

The Scotia también ofrece una ración de experiencias sobrenaturales. Una investigación llevada a cabo en 2007 por un equipo de médiums concluyó que había presencias fantasmales en la bodega del bar. Por su parte, el propietario afirma haber visto a la que se conoce como "Dama Verde", de quien se dice que deambula por el establecimiento a horas intempestivas.

Conducir unas dos horas por la A82 para llegar a Glencoe desde Glasgow puede ser un fastidio, pero cualquier aficionado a lo paranormal que se precie no puede perdérselo. Sin embargo, este paraje tiene mucho más que ofrecer, puesto que se trata de uno de los recorridos más impresionantes de Escocia, que atraviesa las montañas y los lagos salvajes del parque nacional de los Trossachs.

Si volvemos a los fantasmas, debes saber que Glencoe es famoso en todo el país por haber sido el lugar donde se perpetró una gran masacre. Sucedió en 1692, cuando el clan Campbell traicionó la hospitalidad que el clan MacDonald les había ofrecido y asesinó a 38 de sus anfitriones. En la actualidad, algunos senderistas siguen afirmando escuchar los gritos de los malogrados miembros del clan resonando en el valle.