Las 5 mejores cosas que hacer en familia en Blackpool

Atrévete a acercarte a algunos de los ejemplares de la fauna salvaje más fieros del mundo. Blackpool pone todo el reino animal a tus pies, desde serenas jirafas hasta aterradores tigres, pasando por espectaculares simios. Prepárate para ver cómo los gorilas cuidan cariñosamente unos de otros, a cachorros de tigre jugando alborotados y a los charlatanes loros que sobrevuelan el cielo en bellas ráfagas de color.

Este zoológico acoge algunas de las especies más majestuosas de África. Además, los niños disfrutarán a lo grande en el recinto interactivo, acariciando a las cabras y la suave lana de las ovejas.

Sube la cremallera del traje de neopreno y plántale cara a tus miedos, o tacha de la lista ese antiguo deseo de sumergirte en las aguas infestadas de tiburones del Sea Life Centre. No podrás evitar contener el aliento mientras los ágiles escualos se deslizan lentamente hacia ti clavándote sus pequeños ojos negros.

Si lo prefieres, puedes quedarte al otro lado del cristal y disfrutar del ir y venir hipnótico de criaturas como medusas y caballitos de mar, u observar el frenesí con el que las rayas dan cuenta de su comida.

Ponte el cinturón y agárrate bien porque te esperan emociones fuertes, ya sea por la subida y bajada a casi 130 kilómetros por hora de la atracción Ice Blast o por las apariciones terroríficas que te saldrán al paso en el tren fantasma de este parque temático de Blackpool. Nuestro único consejo: no montes en la sobrecogedora Big One después de comer… Se eleva por encima de Blackpool como la aleta de un tiburón y podrás oír los gritos a kilómetros a la redonda.

Big One fue la montaña rusa más elevada y rápida de Europa cuando se inauguró, y sigue atrayendo desde entonces a multitud de valientes. Cuando el tren se detenga en la cresta, recuerda mantener la calma para poder disfrutar de las espectaculares vistas de las olas del mar más abajo. Segundos después, ya estarás emprendiendo la retorcida bajada y te habrás dejado el estómago allí arriba.

Sandcastle Waterpark está cubierto y es un lugar perfecto para refrescarse en Blackpool, llueva o truene. Con empinados toboganes y atracciones de flotadores gigantes, este parque acuático hará las delicias de los niños de cualquier edad.

Podrás deslizarte por montañas rusas de agua o girar con rapidez en oscuros tubos antes de salir despedido hacia las espumosas piscinas de Sandcastle. Y siempre bajo techo. En este batiburrillo de sinuosas pistas, piscinas climatizadas y tranquilos ríos artificiales, encontrarás diversión para toda la familia.

Después de un ajetreado día impregnado en los colores y los sonidos de Blackpool, nada mejor que recargar las pilas en Bella Italia. Aunque prácticamente todos los restaurantes de la ciudad preparan platos sabrosos, perfectos para grandes y pequeños, Bella Italia es, sin duda, uno de nuestros favoritos. Bien es cierto que con la comida italiana se acierta siempre, pero es que el menú infantil de este establecimiento satisfará a los paladares más exigentes.

Es un lugar perfecto para comer a gusto, desde pizzas recién hechas hasta jugosas pastas, y a menos de cinco minutos de Winter Gardens y la torre de Blackpool.