Las 10 mejores cosas que hacer en Whitby

Khyber Pass es el nombre de una pequeña calle que se encuentra en lo alto de la colina que hay detrás de Pier Road y del muelle. El muelle West Pier, junto a la playa de Whitby, es un lugar perfecto para empezar el día sintiendo la brisa marina en la piel. Cómprate un café y bébetelo con vistas al mar en las murallas, en la antigua batería Gun Battery.

Cuando emprendas tu camino hacia el interior en dirección al Khyber Pass, verás un tramo de escaleras a tu derecha. Si las subes, llegarás al arco Whalebone Arch, que conmemora la historia de la localidad como puerto de balleneros. Aunque el arco lleva ahí desde 1853, los huesos actuales son los terceros que se han erigido en este lugar.

Ninguna visita a una playa de Yorkshire está completa sin remar un rato en el mar del Norte. Durante los días de verano, la playa de Whitby y las cuevas de los alrededores suelen llenarse de gente. Camina por la arena un par de kilómetros hasta llegar a Sandsend, un pueblecito al final de la playa que constituye uno de los lugares más populares de la zona para tomar el sol. Entre las opciones de alojamiento por aquí encontrarás desde grandes retiros rurales hasta acogedores B&B. Echa un vistazo a todas las opciones disponibles en la zona de Sandsend.

Durante los meses de verano, encontrarás el típico entorno de playa británico tanto en Whitby como en los alrededores, con paseos en burro, furgonetas de venta de helados y coloridas cabañas de playa. También es un buen lugar para hacer surf, lanzar a volar cometas y buscar fósiles.

Whitby tiene una relación muy estrecha con el capitán James Cook, el famoso explorador británico. Él mismo nació en la localidad de Marton, a unos 48 kilómetros de distancia, pero recibió su formación naval en Whitby, y su barco, el HMS Endeavour, también se construyó aquí.

En homenaje a esta asociación, se erigió una estatua en su honor cerca del Whalebone Arch, se construyó un museo en la casa donde trabajó como aprendiz y se creó una réplica a escala reducida de su barco. Este buque, algo más pequeño que el original y con un funcionamiento a motor (a diferencia del velero original), sale cada día desde Fish Quay, en el puerto de Whitby, y recorre la costa hasta Sandsend en un viaje de ida y vuelta.

La costa británica es sinónimo de fish and chips. Desde luego, este plato tradicional, que consta de bacalao o abadejo fresco rebozado y crujientes patatas fritas con sal y vinagre, sabe mucho mejor a orillas del mar. Aunque quizás lo disfrutes más si lo pides para llevar y te lo tomas, por ejemplo, en el refugio Whitby Bandstand, ten cuidado con las gaviotas que intenten robarte patatas: las que están por la zona del muelle pueden ser especialmente grandes y traicioneras.

El mejor lugar para degustar este almuerzo tan delicioso es Quayside, un restaurante galardonado en la edición número 26 de los premios anuales National Fish & Chip Awards como el mejor establecimiento de fish and chips del país en el 2014. Lo encontrarás en Pier Road, rodeado de otros restaurantes, pubs, tiendas, cafeterías y recreativos.

Las escaleras que van desde Church Lane hasta la iglesia de Santa María fueron el escenario del impresionante final de Drácula de Bram Stoker (el libro, no la película), y las vistas del puerto de Whitby mientras los vas subiendo son espectaculares. Es habitual ir contando los escalones mientras subes, así que no te sorprendas si escuchas a la gente murmurar a tu paso.

Cuando llegues a la cima, la antigua iglesia no será el único punto de interés que encontrarás, ya que lo que más suele llamar la atención es el cementerio. Algunos puertos de la zona recibían a numerosos piratas y saqueadores, y muchas de sus lápidas tienen grabados de calaveras y huesos cruzados.

Los hoteles ubicados en la zona siguen la arquitectura georgiana y victoriana tradicional. Y, aunque algunos edificios son bastantes antiguos, las habitaciones son pintorescas y rebosan personalidad.

Aunque ha habido una abadía en este impresionante promontorio desde el año 657 d. C., las ruinas que hay ahora se remontan al siglo XIII. Tiene un aspecto gótico muy distintivo, que sin duda sirvió de inspiración a Bram Stoker, y, con su ayuda, Whitby se convirtió en la capital gótica del Reino Unido.

A pesar de haberse visto dañada tras siglos de tormentas desde que Enrique VIII la cerró en el año 1540, e incluso fue bombardeaba por la marina alemana durante la Primera Guerra Mundial, la característica forma de la abadía todavía se reconoce con claridad. Como desafío ante todos los infortunios que ha sufrido, todavía quedan dos altas murallas en pie.

El Whitby Museum alberga una amplia y ecléctica colección de objetos que se remontan al periodo Jurásico, la gran mayoría encontrados en la ciudad y los alrededores. Sin lugar a dudas, el principal punto de interés es la Mano de la Gloria, una mano humana momificada que, según la leyenda, usaban los ladrones para dormir a sus víctimas.

Si todo esto te parece demasiado terrorífico, dirígete a la Pannett Art Gallery, en el mismo edificio. En esta galería, encontrarás una colección permanente de pinturas de los siglos XIX y XX en las que se representan sobre todo escenas locales.

Whitby se encuentra justo en un extremo del impresionante parque nacional de North Yorkshire Moors. Una de las mejores formas de disfrutar de su esplendor natural es a bordo del ferrocarril de vapor que va de Whitby a Pickering, cerca de York.

En su recorrido, atraviesa el valle del río Esk y pasa por históricos viaductos y pueblos recónditos llenos de encanto. Una de las paradas es muy popular entre los fans de las películas de Harry Potter: la estación de Goathland era la parada final del Hogwarts Express, Hogsmeade.

Aunque solo está a una hora, quizás te interese reservar una habitación en un hotel más cerca de Pickering para disfrutar de un cambio de aires. Si es así, podrás elegir entre diversas opciones, como B&B, casas de campo y hoteles para familias.

Los barcos que parten de Whitby van en busca de ballenas, pero no para cazarlas; lo que los pasajeros esperan de estas excursiones es poder acercarse a estos hermosos mamíferos marinos. En los recorridos que se hacen a diario en verano es posible avistar ballenas minke, sei, comunes e incluso jorobadas, así como delfines, marsopas y focas.

Aunque no estés en Whitby en verano, también podrás hacer otros cruceros por la costa cualquier día. Hay una ruta hacia el sur para avistar la colonia de focas de Ravenscar y otra en dirección norte hasta el encantador pueblo pesquero de Staithes. Incluso puedes hacer un crucero por el río Esk atravesando la zona de North Yorkshire Moors. Apuesta por embarcar en la salida que se hace al atardecer para disfrutarla al máximo.

Casi toda la sabiduría popular moderna sobre vampiros se basa en la famosa novela de Bram Stoker, Drácula. Gran parte de la novela está ambientada en Whitby, entre las calles históricas y los puntos de referencia más famosos. La Dracula Experience es una mezcla entre una casa embrujada y una aventura literaria, ya que hace realidad ocho escenas del libro, con actores y efectos especiales.

Además, el edificio donde se realiza la actividad también oculta una historia dramática. Puedes volver al anochecer el primer sábado de cada mes para asistir a una caza de fantasmas con un guía, aunque entonces las luces y sonidos extraños no serán fruto de los efectos especiales.