6 lugares para aprender algo nuevo en Londres

Aunque ya solo el pasado de Londres es enormemente interesante, sus museos cuentan historias de lugares todo el mundo. Desde su fundación en 1753, el Museo Británico alberga bajo su enorme cúpula de cristal tesoros de culturas antiguas y modernas de todo el planeta.

Aquí podrás ver auténticos sarcófagos egipcios bellamente decorados, increíbles ruinas romanas y artefactos ingleses antiguos. No te pierdas la piedra de Rosetta, una estela de carácter casi mítico que facilitó la clave con la que se desentrañaron las escrituras de civilizaciones desaparecidas hace siglos.

Cualquier aficionado al arte que se tome la materia un poco en serio necesitaría varios días para visitar en su totalidad las excelentes galerías de Londres, tanto si le atraen las originales creaciones contemporáneas como las grandes obras clásicas. La Galería Nacional, situada en la histórica Trafalgar Square bajo la atenta mirada de la estatua de lord Nelson, alberga una increíble colección de más de 2300 pinturas.

Déjate sorprender por su imponente fachada exterior, con columnas de piedra y cúpulas de estilo neoclásico, como cabría esperar de una galería que contiene obras de todo tipo, desde artistas de principios del siglo XIII hasta grandes maestros europeos, como Cézanne y Van Gogh.

Cuando pasees a orillas del río en los alrededores de la catedral de San Pablo, o bien por Westminster, junto al Palacio de Buckingham, pronto te darás cuenta de que todos los rincones del centro de Londres albergan algún punto de referencia. Pero no hay nada como su monumento más emblemático: la torre de Londres. Esta construcción con más de 1000 años de antigüedad es una visita obligada para los aficionados a la historia y los admiradores de la arquitectura normanda.

Disfrutarás enormemente paseando tras sus almenas de piedra, contemplando los cuervos en el patio y recorriendo las enormes salas flanqueadas de deslumbrantes armaduras. No te pierdas en especial la torre Blanca, un torreón de infausta memoria que se considera la parte más antigua del castillo. En su interior podrás visitar una capilla románica.

El London Eye, ubicado en el tramo cultural del South Bank, es una noria plateada gigante que se eleva sobre el cielo londinense. Esta increíble maravilla moderna abrió sus puertas al público en el año 2000 y cuenta con una portentosa altura de 135 metros.

Consigue tu entrada y accede al interior de una de sus amplias cabinas ovales para pasajeros. El recorrido dura 45 minutos y te regalará unas estupendas vistas de pájaro del horizonte urbano que no podrás olvidar.

Londres se distingue en especial por su animada escena teatral, sobre todo en la zona del West End. Sin embargo, muchos visitantes también querrán acercarse al Globe para asistir a representaciones de las obras del Bardo, interpretadas con auténtica fastuosidad clásica. El Shakespeare's Globe, situado a orillas del Támesis, es una reconstrucción casi exacta del Globe, un teatro circular isabelino donde Shakespeare presentaba muchas de sus obras ante un público boquiabierto.

El nuevo Globe, construido prestando suma atención a los detalles históricos, destaca por su estructura creada íntegramente con sólido roble y su genuino tejado de paja, el único de Londres. En este marco incomparable, podrás asistir a conciertos a la luz de las velas, producciones dramáticas modernas y, por supuesto, numerosas obras de Shakespeare.

Si buscas un refrescante toque contemporáneo, no te pierdas la Tate Modern, un sorprendente museo situado en la orilla sur del Támesis, en pleno centro de Londres. Este complejo ocupa la antigua central eléctrica de Bankside, un gigantesco edificio industrial de ladrillos rojos que hoy en día alberga obras expresionistas, surrealistas y abstractas. No te pierdas las creaciones de grandes artistas como Matisse y Rothko, así como de numerosos talentos emergentes.