Las 10 mejores escapadas a finales de verano por Europa

El Algarve, situado al sur del país, es un precioso y popular tramo de la costa portuguesa. Se encuentra casi tan al sur como los puntos más meridionales de la Europa continental, por lo que las temperaturas altas suelen durar más tiempo. Precisamente por eso, las arenas doradas y las aguas turquesas de esta amplia zona son ideales para esa escapada a final de verano.

Portimão y Lagoa, las ciudades más turísticas del Algarve, son opciones perfectas para tu viaje. Además de su impresionante litoral, la región también alberga muchísimos parques acuáticos y complejos turísticos para toda la familia. Si andas buscando unas vacaciones relajadas, tienes numerosos paisajes con los que deleitarte, además de puntos de interés históricos a la espera de que los descubras.

La Costa del Sol no es solo una de las zonas del litoral más destacadas de España, sino de toda Europa, y, por supuesto, su nombre ya te da una pista de lo que te espera al llegar... Como ya imaginarás, el verano es la mejor época para visitar esta parte de la costa mediterránea, aunque, eso sí, si optas por ir cuando va entrando el otoño, te librarás del ajetreo de las playas repletas de gente.

La Costa del Sol ofrece, además, muchísima variedad. Las ciudades que se alzan ante sus famosas playas combinan atractivos históricos y modernos: desde castillos de cuento de hadas, como los de Colomares o de la Duquesa, hasta divertidísimos parques acuáticos, como los de Aquamijas y Aqualand. Más allá de la costa, las montañas también ofrecen aventuras ilimitadas, además de unas vistas inigualables de la zona.

El condado costero de Hampshire, al sur de Inglaterra, es un destino muy popular en cualquier momento del año. Sin duda alguna, el parque nacional New Forest es su atractivo estrella, con sus antiguos bosques ancestrales y pueblos de lo más pintorescos. Por otra parte, el extremo occidental de los South Downs es otro enclave que merece la pena visitar.

Cuando te hayas empapado del esplendor de la naturaleza, también tienes otros tipos de atracciones que no querrás perderte. Portsmouth, Southampton y la ciudad condal de Winchester se encuentran aquí, cada una con un gran abanico de puntos de interés históricos y culturales. Pon rumbo a estos destinos en septiembre para asistir al Southampton Boat Show, uno de los festivales de navegación más importantes de Europa.

El valle del Loira es de una bellísima región en el centro de Francia que, como puedes imaginar por el nombre, sigue el curso del río Loira. La sección central del curso de este río está declarada patrimonio de la humanidad por la UNESCO dada su gran importancia histórica, y es que su fértil rivera y la gran cantidad de granjas y plantaciones que la adornan le ha granjeado el título del "jardín de Francia".

Entre los puntos más destacados del valle del Loira se hallan las ciudades históricas de Tours, Angers y Blois, imponentes castillos como el Château de Valençay y el Château de Chambord, y, por supuesto, los numerosos viñedos que crecen gracias al inusual clima cálido que crea el río.

La zona norte de la histórica región de Mediodía-Pirineos alberga una magnífica combinación de belleza natural y encanto histórico. Esta parte se encuentra alejada de las montañas de los Pirineos, por lo que olvídate del frío propio de estas cimas: lo que te espera es la calidez típica del sur de Francia.

El norte de Mediodía-Pirineos, una de las zonas más relajadas del país, se caracteriza por sus tranquilos días de verano acompañados de buena comida (y, por supuesto, buen vino). Explora el valle del Lot y las ciudades históricas del lugar, como Albi y Cahors. La lista de pueblos y pequeñas ciudades de la región que figuran entre las más hermosas de Francia es casi interminable, ¡por lo que no descartes la idea de un viaje en carretera!

Finisterre, en el oeste de Bretaña, es, de hecho, la parte más occidental de la Francia continental. El parque natural regional de Armórica es un tesoro indiscutible de la región, con su escarpada costa, cimas de granito y densos bosques. La mayor parte de la zona que rodea el parque está compuesta por el encantador paisaje accidentado típico de la Francia rural.

En torno a este espectacular panorama se ubican las históricas ciudades de Brest, Landerneau y Quimper. Sin embargo, uno de los reclamos más señalados de Finisterre es su litoral. No te vayas sin antes pasarte por las impresionantes puntas de Raz y de Pen-Hir, además de los diferentes islotes salpicados de faros y fuertes históricos.

Castilla y León, al noroeste de España, está caracterizada por sus enormes espacios abiertos. Esta comunidad se sitúa en una meseta a gran altitud, rodeada de montañas, y es cobijo de unas cuantas ciudades de gran importancia histórica. Gracias a estas características, cuenta con una fascinante combinación de atractivos naturales y artificiales (eso sí, vas a tener que recorrer unos cuantos kilómetros en coche para verlos todos).

Algunos de los aspectos históricos más populares son, indudablemente, la ciudad amurallada de Ávila y las catedrales de Burgos y de León, además de la impresionante arquitectura de Salamanca y Segovia. Y, bueno, aunque las festividades de Semana Santa se celebran más entrado el año, si decides visitar Castilla y León en primavera, ¡no tienen pérdida alguna! En caso de que te apetezca deleitarte con un panorama de ensueño, el entorno paisajístico de Las Médulas es exactamente lo que buscas.

El condado de Yorkshire es el más grande de Inglaterra, y se encuentra actualmente dividido en cuatro: norte, este, oeste y sur, cada uno con carácter propio. La naturaleza es, obviamente, la protagonista de sus principales atractivos. En el norte te toparás con los parques nacionales de North York Moors y Yorkshire Dales; en el este te esperan los Wols de Yorkshire y la costa; mientras que el oeste y el sur de Yorkshire te ofrecen el parque nacional del Distrito de los Picos. No podrás decir que no tienes dónde elegir...

Eso sí, las ciudades y pueblos no se quedan atrás. La antiquísima y preciosa York es una parada prácticamente obligatoria en tu itinerario, pero no es la única joya de estos lares, tal y como podrás comprobar en Bridlington y Scarborough, o en las icónicas Sheffield y Leeds (repletas de cultura), además de una lista interminable de pequeñas y emblemáticas ciudades y pueblos increíblemente apacibles.

El Principado de Asturias está caracterizado por su paisaje montañoso. Se sitúa en la costa norte de España, y el litoral está formado en su mayoría por acantilados y rocas azotadas por el viento, además de encantadoras ciudades en las que se esparcen casitas con sus típicos tejados de terracota. Hacia el interior, el panorama es claramente alpino: imagínate montañas con cimas repletas de nieve, valles de paredes afiladas, bosques de pinos y sinuosos ríos de aguas cristalinas. El parque natural de Somiedo y el de los Picos de Europa son una muestra magnífica del esplendor natural de esta región.

Por otra parte, las ciudades también son un plato fuerte de la zona, como pone de manifiesto Gijón. La ciudad más grande de Asturias destaca por sus espectaculares playas de arena y su increíble gastronomía (que debes probar acompañada, por supuesto, de un poquito de sidra). Otras ciudades con muchísimos puntos de interés histórico son Oviedo y Avilés, así que ya sabes, ¡aprovecha para visitarlas!

El extremo suroeste de Inglaterra representa una de las regiones más bellas del país, con Devon como enclave destacado. Es hogar de la Riviera inglesa, el parque nacional de Dartmoor, el valle de Tamar, la costa Jurásica y otras zonas de una belleza natural sobrecogedora. Se trata de un condado principalmente rural, por lo que constituye un paraíso para excursionistas y todo un sueño para quienes fotografían paisajes, si bien eso no quiere decir que no incluya atracciones para divertirte en familia, como, por ejemplo, ¡algunas de las mejores playas de Reino Unido!

La principal ciudad de Devon es Exeter, a la que no le faltan alicientes. Ya de por sí, la catedral de la ciudad te fascinará, pero además encontrarás museos, parques temáticos y castillos en los alrededores. Si lo que te apetece es una escapada a la playa para disfrutar del último resquicio del calor veraniego, tienes Westward Ho! y Woolacombe al norte, o Blackpool Sands y Exmouth al sur, ¡entre muchas otras!