10 restaurantes increíbles de Madrid

La Posada del Nuncio, en Madrid, es una parada imprescindible si te apetece disfrutar de la tradición culinaria como en casa. El local se encuentra cerca de la plaza Mayor, la monumental explanada de la ciudad donde se celebraba antiguamente el principal mercado madrileño, y te permite conocer un poquito de la historia de la capital mientras cenas.

Si vienes en invierno, no puedes irte sin comer un plato del típico cocido madrileño. También te recomendamos probar sus grandes tomates, de textura ligera e intenso sabor. A la Posada del Nuncio se viene a disfrutar de los deliciosos matices de la gastronomía tradicional, pero también te encantará la amabilidad del personal.

El restaurante TriCiclo es un animado establecimiento situado en Madrid que resulta ideal para disfrutar de esa excelente tradición de compartir unas tapas. Se dice que estos pequeños platos de comida tienen su origen en la costumbre de los propietarios de los bares de servir porciones de pan o carne para cubrir las bebidas y alejar a las moscas. La tradición ha ido evolucionando hasta lo que es hoy en día, un estilo de comer que nos permite probar todo tipo de delicias en pequeñas raciones.

El nombre del restaurante, TriCiclo, hace referencia a los tres chefs que dirigen la cocina, quienes combinan los sabores con ingenio en una fusión de tradición y tendencias modernas. Y, como recomendación, no te vayas sin degustar su sangría casera.

Sacha es un local de ambiente íntimo en Madrid que se fundó con recetas familiares y una filosofía gastronómica fiel a la vieja escuela española. Lo abrió hace décadas una pareja que lo bautizó con el nombre de su hijo (en la actualidad, el chef del restaurante). Su menú cambia según la temporada y presenta platos vascos y gallegos que permiten saborear la exquisita frescura y sencillez de estas dos tradiciones culinarias. Si lo frecuentan madrileños, visitantes y, aún más revelador, los chefs de otros restaurantes, será por algo.

Inclúyelo en tu visita a Madrid y podrás mimar el paladar con pescado fresco y tapas clásicas preparadas con saber hacer. Si vienes en verano, quizá te apetezca cenar en su terraza, adornada con frondosos árboles.

El Asador Real es un asador clásico mediterráneo ubicado en el antiguo centro de la capital, el célebre Madrid de los Austrias. Su ubicación, en los alrededores de la plaza Mayor, está llena de historia. Aunque en su momento acogía corridas de toros y coronaciones, esta zona es ahora un importante núcleo de la cultura gastronómica madrileña.

Te recomendamos probar el cochinillo, que se cocina de manera tradicional en hornos de ladrillo hasta alcanzar una textura crujiente por fuera y suave por dentro. Aunque esta receta suele ser muy común en las celebraciones de los madrileños, en el Asador Real es uno de los platos estrella cualquier día de la semana. La pierna de cordero a la leña es también una auténtica delicia para el paladar.

DiverXO es un local exclusivo y elegante ubicado en Madrid que ofrece una atmósfera muy moderna con una decoración actual de color blanco y líneas limpias. Te recomendamos aprovechar para explorar la zona en la que se encuentra, Chamartín, un distrito de moda que incluye dos célebres rascacielos inclinados: Puerta de Europa y el Auditorio Nacional de Música.

Después, prepárate para estimular los sentidos con la creatividad del chef de DiverXO, quien sabe mezclar ingredientes del Mediterráneo, Asia y Latinoamérica. Sus menús degustación contemporáneos son refrescantes y artísticos, y se sirven en una original vajilla.

Decadente destaca entre los principales restaurantes del madrileño Barrio de las Letras, una zona repleta de salas de espectáculos, boutiques elegantes y animadas cervecerías. Se encuentra cerca de las galerías de arte del Ateneo, por lo que resulta perfecto para comer o cenar con estilo después de una visita cultural. Lo encontrarás siempre bastante concurrido, ya que ofrece buena música, un menú ingenioso y una atmósfera moderna y relajada.

Aquí podrás disfrutar de una mezcla de platos clásicos de nuestra geografía e ingredientes internacionales, así como de una variada carta de vinos. Después de mimar el paladar, quizá quieras bajar al piso inferior y descubrir su coqueta coctelería con paredes de piedra.

El Paraguas es un restaurante de la moderna calle de Jorge Juan, en el exclusivo barrio de Salamanca, en Madrid. Se trata de un lugar en el que la decoración, la atmósfera y el menú se conjugan para reflejar el nivel de sofisticación que alcanza la restauración en la capital. Los amantes de la comida caerán rendidos ante su exquisita selección de productos frescos como pescado, carnes y verduras, todo ello servido en un entorno coqueto y tranquilo.

Te recomendamos probar el gazpacho, que aquí, además de incluir tomates y otras verduras, se sirve con langosta y un sabor dulce y ácido gracias a ingredientes "secretos" como la fresa.

La Tasquería es una tasca ubicada en el acogedor barrio madrileño de Chamberí. Tras pasar una tarde recorriendo los bonitos terrenos del parque del Retiro, declarados Patrimonio de la Humanidad por la Unesco, este restaurante es fantástico para disfrutar de una aventura gastronómica que tus papilas gustativas no olvidarán.

La decoración minimalista y su atmósfera relajada contribuyen a realzar aún más la experiencia culinaria. Y es que aquí sirven una innovadora combinación de ingredientes y una presentación espectacular, tan especial como la inclusión de partes de la carne que no se suelen cocinar. Si quieres explorar nuevos sabores, te fascinará su selección gourmet, que abraza elementos como la lengua de ternera, el hígado de perdiz y el estómago de pollo.

DSTAgE es un elegante local de Madrid de estilo industrial donde puedes disfrutar de la influencia única de la gastronomía japonesa en platos nacionales. Se trata de un buen sitio en el que cenar después de comenzar la noche con una visita cultural al Museo Nacional del Prado, situado en los alrededores.

El nombre del restaurante son las siglas en inglés de "Días de oler, probar, sorprenderse, crecer y disfrutar", y también hace referencia a que es posible ver cómo preparan la comida. La atmósfera en el interior del local es relajada, con una distribución en la que destaca, sin duda, la cocina abierta. Esta característica permite echar un vistazo y disfrutar de los aromas mientras preparan las delicias que después te servirán. Su menú degustación consta de 18 espectaculares platos, maridados de manera experta con vinos locales.

Ramón Freixa es un sofisticado restaurante ubicado en el barrio de Salamanca, una zona que, en su momento, fue el lugar de residencia de la aristocracia madrileña. Tanto el distrito como este elegante local resultan absolutamente encantadores.

El restaurante se especializa en platos elaborados con productos frescos de la zona, por lo que el menú puede cambiar según la temporada. Lo que no cambia es la excelencia y la creatividad de los sabores, las texturas y las presentaciones. En su cocina emplean fascinantes recetas antiguas y técnicas actuales para crear un amplio abanico de delicias innovadoras y reinterpretaciones de clásicos. Se trata de un auténtico regalo tanto para los amantes de la comida como del buen vino, ya que cuenta con un sumiller experto que sabrá recomendarte el perfecto para tu elección.