Las 10 calles más populares de Madrid

La Gran Vía es una exclusiva calle comercial situada en el centro de Madrid. Atraviesa el epicentro y une los cruces de la plaza de España y la fuente de Cibeles en un largo tramo de teatros, multicines y todas las tiendas que puedas imaginar.

Tanto si vienes a comprar en outlets de populares cadenas como a ver un musical en el majestuoso Teatro Lope de Vega, algo es seguro: su arquitectura es tan espectacular que te costará guardar la cámara de fotos. De hecho, es este aspecto el que define a la Gran Vía, desde el imponente edificio art déco de Telefónica hasta el modernismo de líneas limpias del Edificio Capitol.

El Paseo de la Castellana es el eje de la capital del país. Esta vía atraviesa gran parte de la metrópolis de norte a sur y abarca desde las estruendosas gradas del estadio Santiago Bernabéu hasta el imponente monumento a Cristóbal Colón, cerca de la plaza que lleva su nombre.

Durante el camino, te saldrán lugares de interés a cada paso. Puedes sacar entradas para ver a los galácticos del Real Madrid en acción, pero también tienes cerca las ilustrativas exposiciones del Museo Nacional de Ciencias Naturales, que incluyen gigantescos esqueletos de dinosaurios y fósiles de calamares. Entre todos los lugares de interés, este paseo también une algunas zonas financieras clave, como AZCA o CTBA, en caso de que tu viaje a Madrid sea por negocios.

La Puerta del Sol funciona como epicentro de cinco o seis de las vías más importantes de la ciudad, y constituye uno de esos lugares que no te puedes perder en un viaje a Madrid. Está situada entre la plaza Mayor y el encanto del Barrio de las Letras, con la bulliciosa calle de Alcalá a un lado y la calle Mayor al otro.

Oficialmente, la Puerta del Sol es, además, el kilómetro cero de toda la red de carreteras del país, pero no es por esto por lo que la visitan miles de personas cada día. Aquí se encuentra la Real Casa de Correos (un edificio con toques de rojo que acoge, en la actualidad, la sede de la Presidencia de la Comunidad de Madrid), y una serie de fascinantes estatuas, como una de Carlos III o la célebre "El oso y el madroño".

El Paseo del Prado mide algo menos de un kilómetro de extremo a extremo y, sin embargo, quizá sea la vía con más riqueza cultural de Madrid. Empieza en el norte, en la fuente de Cibeles, y discurre en dirección sur hasta la parada de metro Estación del Arte dibujando una ligera "Z" entre algunos de los museos más prestigiosos del país.

Un recorrido por ella te permitirá visitar, por ejemplo, el Museo Naval, en el que se exponen siglos de intrépida navegación española. También acoge el Museo Thyssen-Bornemisza, con obras maestras de artistas como Vincent Van Gogh o Canaletto. Pero la joya de la corona es, sin duda, el Museo Nacional del Prado, donde podrás ver numerosas piezas de arte nacional de incalculable valor en cada una de sus salas.

La calle Huertas es la puerta de entrada al fascinante Barrio de las Letras. La vía atraviesa directamente este atrayente distrito por su lado sur y pasa por la arbolada plaza del Ángel y sus numerosos cafés antes de ramificarse en multitud de pasajes y callejuelas.

Huertas es, en su mayor parte, una zona peatonal, por lo que resulta un auténtico placer pasear por ella. Durante el trayecto verás palacios de altura media y algunas coquetas explanadas en las que los madrileños toman café y miran el periódico sin acordarse del reloj. Mientras caminas, acuérdate de mirar de vez en cuando hacia abajo, ya que verás versos de Quevedo grabados en el pavimento. Y lo mejor es que vengas con hambre, porque estarás en un auténtico paraíso de las tapas.

La calle Mayor siempre recibe al transeúnte con el sonido del tráfico y el bullicio de la gente que va de acá para allá. Con una extensión de 720 metros, consigue concentrar mucha energía en un tramo breve que va desde la Puerta del Sol hasta el parque de Atenas. Quizá sea un trayecto corto, pero está también repleto de fantásticos lugares de interés.

Uno de los más llamativos es, sin duda, la hermosa plaza Mayor. Sus edificios, en tonos dorado y rojo escarlata, son algunos de los más fotografiados del país. A sus pies, una serie de soportales de origen medieval esconden incontables cafeterías, tabernas y tiendas de recuerdos. Si caminas hasta el extremo de la calle, verás elevarse la majestuosa catedral de la Almudena, una hermosa sinfonía de torres y cúpulas neoclásicas.

La calle de Preciados es una vía en diagonal que divide la mitad norte del casco antiguo de Madrid. Comienza en la plaza del Callao, en el norte, y termina en la espectacular Puerta del Sol, más al sur.

Se trata, probablemente, de la principal calle comercial del centro de la capital del país y es completamente peatonal, por lo que no tendrás que preocuparte de esquivar el tráfico mientras paseas. Aquí podrás comprar todo tipo de artículos, desde los vaqueros Levi's más de moda hasta joyería de Pandora o lo último de Zara, así como zapatillas de última tecnología en Foot Locker.

La calle Cava Baja discurre por el corazón de La Latina, un barrio que se caracteriza por una atmósfera distinta, tranquila. La entrada se encuentra en la plaza Segovia Nueva, desde la cual se extiende en dirección sur hasta terminar en la plaza del Humilladero, cerca del epicentro del distrito.

Cava Baja es la presentación perfecta de La Latina. Se trata, básicamente, de una larga calle bordeada de bares que ofrece terrazas modernas con vistas al paisaje urbano en dirección norte. Está repleta de locales perfectos para tomar el aperitivo en los que se escucha el chisporroteo de las cocinas abiertas. No encontrarás un lugar mejor para empezar la noche con unas tapas locales y buena conversación con los madrileños.

La calle de Segovia ofrece, quizá, el acceso más sencillo a todos los célebres jardines y palacios que se extienden en el lado oeste de Madrid. Esta vía une los colores y sonidos del distrito Centro con los meandros del río Manzanares.

Si te diriges hacia el norte podrás visitar bonitas zonas arboladas o complejos históricos desde cualquier punto de la calle. Primero te toparás con el parque de Atenas, unos terrenos salpicados de fuentes y pérgolas que rebosan romanticismo. También te recomendamos acercarte a los restos de la muralla árabe, las antiguas fortificaciones de la ciudad, las cuales dan paso al imponente Palacio Real de Madrid.

La calle del Espíritu Santo discurre a través del extremo norte del animado barrio de Malasaña. Aquí no verás palacios regios ni amplias plazas; su atractivo reside en su vivo ambiente y su oferta comercial. De hecho, esta zona es, probablemente, el mejor lugar para visitar mercadillos de artículos retro de la ciudad.

Si la recorres, esquivando las bicis y las motocicletas, enseguida llegarás a una zona totalmente dedicada a vendedores independientes de todo tipo. Aquí verás tiendas de flores de estilo antiguo y librerías únicas con altas pilas de volúmenes de segunda mano, así como bulliciosas cafeterías de ambiente estudiantil en cada rincón: todo con un aspecto de lo más divertido y fotogénico. ¡A disfrutar!