Las 5 mejores estaciones de esquí de Escocia

La estación de esquí de Glenshee tiene más pistas que cualquier otra montaña escocesa, lo que la convierte en una fantástica opción para practicar este deporte en el Reino Unido. En total, tiene 21 telesquís y 40 kilómetros de pistas por donde deslizarse. Entre diciembre y marzo hay nieve más que suficiente, pero hacia el final de la temporada puede que te encuentres varias pistas cerradas.

Este complejo es ideal para los viajes a la nieve en familia, ya que ofrece clases en su propia academia y tiene personal sanitario permanente. La estación de esquí también recibe el nombre de "3 Glens" y se encuentra en el condado de Aberdeen, al noreste de las Tierras Altas. Dispone de equipos y esquís de buena calidad para alquiler.

Glencoe es el área de esquí más antigua de Escocia, además de un complejo muy popular entre los esquiadores de nivel medio y avanzado gracias a sus numerosas pistas rojas y sus emocionantes pistas negras.

Dispone de ocho telesillas y un tamaño perfecto para pasar un fin de semana divertido practicando deportes de invierno en el Reino Unido. Muchas de estas instalaciones se han renovado o cambiado en los últimos años, así que ahora puedes esquiar desde la cumbre de la montaña hasta el aparcamiento. ¡Y vuelta a empezar! Aunque Glencoe está bastante aislado, hay un autobús directo desde Glasgow hasta la estación de esquí.

Nevis se encuentra a 1223 metros de altitud y es la estación de esquí más alta del Reino Unido, por lo que la nieve está asegurada. La temporada de esquí va de diciembre a abril y ofrece muchas pendientes suaves perfectas para los principiantes. Después de una nevada abundante, los veteranos del esquí y el snowboard suelen abandonar las pistas para poner a prueba sus habilidades sobre la gruesa capa de nieve en polvo, con taludes y barrancos.

En total, Nevis Range tiene 35 pistas de esquí y 12 telesquís, incluido un telesilla cubierto. Los aficionados al snowboard encontrarán un parque con un medio tubo muy divertido para perfeccionar la técnica o ver las acrobacias de los profesionales.

En Cairngorm suelen entrenar los equipos de deportes de invierno de Gran Bretaña, así que el nombre de esta montaña es sinónimo de esquí para los británicos. Los menos hábiles en la materia encontrarán bastantes pistas fáciles, además de un parque de nieve bien cuidado con barreras, rampas y barandillas. Cerca de la estación base encontrarás una pequeña cafetería y el centro de alquiler de equipamiento.

La nieve no está garantizada, pero gracias a un arsenal de cañones, seguro que encontrarás al menos algunas pistas abiertas durante todo el invierno. Desde lo más alto de esta estación puedes ponerte a prueba en una pista corta y emocionante, o bien disfrutar de unas vistas estupendas.

Lecht es una pequeña estación de esquí situada en las Tierras Altas, con 18 kilómetros de pistas de esquí y 12 telesquís, la mayoría de ellos de arrastre. Posiblemente no es la mejor opción para esquiadores expertos en busca de descensos vertiginosos o difíciles, pero es una buena opción para quienes están aprendiendo a esquiar o a practicar snowboard. Además, aquí las clases son más económicas que en la mayoría de estaciones de esquí de Escocia. Cuando te canses de las pistas, también puedes probar otras actividades divertidas en Lecht, como el trineo o el tubing.

Tomintoul es un pueblo con varios hoteles y bed and breakfasts, así como un centro de información turística, que está a 10 minutos en coche desde el área de esquí de Lecht.