10 actividades baratas en Colonia

La catedral de Colonia (o Kölner Dom) es uno de nuestros puntos de interés favoritos de Alemania, en parte por su popularidad entre los peregrinos cristianos. Desde 1164, alberga el relicario de los Tres Reyes Magos, que viajaron desde Oriente para entregar sus ofrendas al niño Jesús. Aunque a veces pueda abarrotarse de visitantes, esta imponente catedral gótica situada junto a la estación de tren principal sigue siendo impresionante por dentro y por fuera.

El ayuntamiento de Colonia es el más antiguo de Alemania, aunque las distintas adiciones durante más de nueve siglos han creado una curiosa mezcla de diseños arquitectónicos. El edificio histórico que se encuentra justo en la zona sur de la catedral es precioso por dentro y por fuera. Para conocer más detalles interesantes, te recomendamos apuntarte a una visita guiada, pero también puedes explorarlo por tu cuenta de manera gratuita. Echa un vistazo a las 130 estatuas de piedra de la fachada e intenta encontrar la que enseña las nalgas o la famosa Platzjabbeck, una cara muy fea que saca la lengua de madera cada vez que el reloj marca la hora.

Justo al lado del zoológico de Colonia, en la parte septentrional de la ciudad, el Jardín Botánico y Floral alberga más de 10 000 especies de plantas. Este parque de 11,5 hectáreas cuenta con varios invernaderos donde se recrean ambientes tropicales, lo que permite albergar cultivos exóticos, como caña de azúcar, cacao y vainilla. También hay un invernadero de cactus, un jardín mediterráneo y un espléndido jardín de estilo renacentista italiano. Todo esto lo convierte en un lugar muy popular entre los lugareños y turistas que quieren relajarse.

El animado casco antiguo (o Altstadt) es una de las principales atracciones de Colonia. Las serpenteantes calles adoquinadas están repletas de interesantes tiendas y edificios históricos. Como gran parte de la ciudad fue destruida durante la Segunda Guerra Mundial, el Altstadt es una interesante combinación de estructuras preservadas y restauradas. Eso sí, no ha perdido un ápice de su carácter animado, especialmente durante el mercadillo navideño o el Carnaval de Colonia. Echa un vistazo a la fuente Heinzelmännchenbrunnen que se encuentra en Am Hof. Esta llamativa fuente, construida en 1899, muestra a los gnomos que, según cuenta la leyenda, hacían todo el trabajo de la ciudad mientras sus habitantes dormían, pero que se marcharon para siempre tras ser insultados.

Como su nombre sugiere, el Rheinpark, se encuentra a orillas del río Rin, en el norte de Colonia. Abarca nada menos que 40 hectáreas y, aunque en su mayor parte se trata de zonas verdes, alberga algunos rincones únicos que merece la pena explorar. Hay un parque infantil, una ópera, un teatro al aire libre, una estación de teleférico, un spa, un par de restaurantes e incluso un club de playa sobre la arena a orillas del río. Las rutas que atraviesan el parque son muy populares entre los que salen a correr y los patinadores. Además, la orilla del río ofrece unas vistas maravillosas del casco antiguo y la catedral.

La basílica de Santa María del Capitolio es la más grande de las 12 iglesias románicas de Colonia. El bonito edificio histórico, a poca distancia del puente Deutzer, data del siglo XI y, sorprendentemente, todavía conserva las puertas de madera originales instaladas en el año 1046. La iglesia se construyó en el terreno que ocupaba un templo romano, cuyos cimientos aún se pueden ver en la cripta. Entre otros elementos y obras de arte destacados se encuentra la llamativa estatua de la Virgen María, del año 1300.

Si te alejas del casco antiguo de Colonia, llegarás a Ehrenfeld, uno de los barrios más modernos de la ciudad histórica. Los alrededores de la estación de tren de Ehrenfeld albergan grandes murales que inundan las paredes de color. Cada septiembre, el Festival CityLeaks inunda distintos espacios de la ciudad dedicados al arte local con exposiciones y rutas de arte urbano, y Ehrenfeld no iba a ser una excepción.

Las murallas romanas medievales que protegían la ciudad de Colonia se reformaron en la Edad Media. Todavía se conservan algunos de los 12 portales antiguos, entre los que destaca el de Severinstorburg, en Chlodwigplatz, por ser uno de los más grandes e impresionantes. Su imponente estructura, que luce con orgullo el escudo de armas de la ciudad, se usa como recinto de bodas en algunas ocasiones. En el casco antiguo también se pueden ver algunas de las antiguas torres romanas circulares.

La Gran Iglesia de San Martín, quizás la más llamativa de todas las iglesias románicas de Colonia, sufrió importantes daños durante la Segunda Guerra Mundial y tuvo que restaurarse para lucir su esplendor original. Las ruinas de los antiguos depósitos romanos sobre los que se construyó están integradas en las fachadas de la imponente torre, a orillas del río. Rodeada de coloridas casas y del bonito parque Rheingarten, la Gran Iglesia de San Martín parece un castillo sacado de un cuento de hadas.

En Colonia hay varios mercadillos muy populares entre los lugareños. Quizás el mejor sea el Kölner Südstadt Flohmarkt, que se monta cerca del parque Volksgarten un domingo al mes (por lo general, el primero). La selección de productos a la venta es muy amplia, desde antigüedades a antiguos vinilos y muebles retro. En general, los precios son justos y el ambiente suele ser muy animado.