10 lugares de Faro que solo conocen sus habitantes

Cidade Velha, el casco antiguo de Faro, es la cuna de la ciudad. Una de las principales atracciones es la catedral, pero vale la pena explorar todos los rincones, edificios y calles para ver cómo reflejan la historia y las tradiciones locales y el modo de vida de sus habitantes.

El casco antiguo está rodeado por los restos de la antigua muralla de la ciudad y se puede acceder a través de tres arcos medievales que evocan el encanto de antaño: el Arco da Vila, el Arco do Repouso y el Arco da Porta Nova. Cruza el Arco da Vila para ver los restos árabes de la ciudad. Las calles adoquinadas, las fachadas blancas y las casas superpuestas que evocan el norte de África. Cuando termines de explorar la zona, prueba algunos platos regionales en uno de los restaurantes locales del casco antiguo.

La Igreja do Carmo es una iglesia local situada en el casco antiguo de Faro. A pesar de ser uno de los monumentos más importantes de la ciudad, a menudo se pasa por alto porque los visitantes suelen sentirse más atraídos por la peculiar capilla de los huesos, situada detrás del edificio principal de la iglesia y repleta de huesos humanos.

Observa el doble campanario y la imponente fachada barroca de esta iglesia, antes de entrar para explorar detenidamente los altares con intrincados detalles tallados en madera dorada. También se la conoce como la Igreja da Ordem Terceira de Nossa Senhora do Monte do Carmo y ofrece vistas al Largo do Carmo, reconocible por su característico suelo adoquinado. Detrás de la iglesia, verás el pequeño jardín donde se encuentra la curiosa capilla de los huesos.

El Jardim Manuel Bívar es uno de los espacios al aire libre más impresionantes de Faro. Este parque municipal, ubicado entre el muelle y el Arco da Vila, está rodeado de árboles, cafeterías con terraza y los típicos paseos adoquinados. Es un punto de reunión habitual entre lugareños de todas las edades y un lugar privilegiado para disfrutar del paisaje de la Ria Formosa.

Quizás este sea el motivo por el que el parque suele estar bastante concurrido durante el día, sobre todo por familias y residentes disfrutando de su rutina diaria. Pero la diversión no acaba al ponerse el sol, ya que la zona es perfecta para dar un paseo nocturno o tomar algo en la terraza de una cafetería cuando refresca un poco. El Jardim Manuel Bívar no es un atractivo exclusivo del verano, ya que la temperatura en Faro es bastante agradable durante todo el año. Otro dato que puede interesarte es que se organizan toda una variedad de eventos en el parque, según la temporada, como ferias del libro, mercados, conciertos al aire libre y exposiciones.

La Rua de Santo António es una calle peatonal que conecta el centro de la ciudad con la parte más moderna. Gran parte de la vida diaria de Faro ocurre en esta calle, que incluye por igual tiendas modernas y tradicionales, por lo que puedes hacerte una idea de cómo es el día a día de los lugareños, en buena parte también porque no suele haber muchos turistas.

En la Rua de Santo António hay muchos edificios y tiendas locales interesantes, pero no olvides mirar hacia abajo para apreciar el magnífico suelo adoquinado de la calle, que es una obra de arte en sí misma. También puedes hacerlo mientras te tomas un refresco o una pasta tradicional en una de las muchas cafeterías con terraza.

La Zona do Ludo es perfecta si buscas una experiencia al aire libre en Faro. Esta zona, ubicada entre el aeropuerto y la Quinta do Lago, es perfecta para dar un paseo a pie o en bicicleta lejos del tráfico, el ruido y los lugares más turísticos del centro de Faro.

El entorno natural de la Zona do Ludo atrae a patos y flamencos, por lo que es ideal si te gusta observar las aves. Para un momento, cierra los ojos, respira profundamente y disfruta de los agradables sonidos de la naturaleza.

El Teatro Lethes, fundado en 1874, es uno de los más antiguos del país. Se trata de uno de los símbolos culturales más importantes de Faro, imprescindible si te gusta este tipo de actividades.

De todos modos, tampoco es necesario asistir a una obra de teatro; el edificio en sí ya merece la pena. No te dejes engañar por su fachada austera: en su interior oculta una joya, con un espléndido techo pintado, exquisitas tallas de madera y un lujoso terciopelo que te transportarán al siglo XIX.

El Mercado Municipal de Faro, el principal de la ciudad, es uno de los mejores lugares en los que mezclarse con los lugareños e incluye una gran variedad de productos, sobre todo pescado y marisco fresco, fruta y verdura. Sumérgete en el bullicio de la vida cotidiana y aprovecha para comprar productos frescos.

Es un lugar muy agradable que te regala la oportunidad de hablar con los vendedores locales y escuchar historias de lo más interesantes. El Mercado Municipal de Faro también cuenta con tiendas y servicios públicos, además de varios restaurantes donde podrás disfrutar de la gastronomía regional.

Si te interesa el contexto histórico de Faro y cómo ha evolucionado la ciudad hasta la actualidad, no puedes perderte el Centro Interpretativo do Arco da Vila. Este museo se fundó para mostrar la historia de Faro y las tradiciones locales.

Se encuentra en uno de los edificios históricos más emblemáticos de la ciudad y, además de los detalles del reloj y del campanario del edificio, ofrece unas vistas fantásticas del casco antiguo y de la Ria Formosa.

Sardinha de Papel es una de las tiendas más originales de Faro. De hecho, no es solo una tienda, sino también un espacio cultural en el que se organizan conciertos y exposiciones de arte. Si te fijas en el mobiliario, por ejemplo, verás que tienen ruedas para poder cambiar fácilmente la disposición de la tienda y adaptarla a las actividades de cada día.

Sardinha de Papel es una organización comunitaria basada principalmente en una cooperación entre fabricantes y vendedores que les aporta beneficios mutuos. Encontrarás productos artesanales de diseño, objetos y prendas de ropa únicos, muebles, piezas de diseño, objetos reciclados y artículos de segunda mano. Es un lugar estupendo para comprar recuerdos auténticos de Faro, ya que difícilmente encontrarás estos productos en otras tiendas de recuerdos.

Si viajas a Faro con niños, el Centro de Ciência Viva do Algarve es un lugar perfecto para disfrutar de un poco de diversión y tiempo de calidad. Se trata de un museo de ciencia espacial y oceánica con muchísimas actividades infantiles, pero eso no significa que no sea apto para adultos, sobre todo si te interesan los hechos científicos.

El espacio interactivo es bastante compacto, pero lo suficientemente grande para albergar una exposición dedicada al mar, un acuario de coral, talleres y un laboratorio donde los niños pueden realizar distintas actividades. Además, se puede interactuar con diferentes animales acuáticos. El Centro de Ciência Viva do Algarve también cuenta con un cibercafé y una zona especializada en actividades astronómicas.