El hotel está muy bien situado y muy bien comunicado (parada del tranvía a 50 mts.), pero nada más. El personal es bastante "pasota" y no muy amable, si tienes cualquier problema no hacen nada por ayudarte, vamos ni disimulan, pasan de ti, hemos estado 5 noches y solo hemos encontrado una chica muy amable, el resto fatal. La habitación estaba sucia y el baño más, para ducharse hay que pensárselo...
Hay habitaciones que dan a un patio interior que supongo deben ser más tranquilas, pero la nuestra daba a la calle principal y en el primer piso, una calle muy ruidosa y muy iluminada, con lo cual dormir se hacia complicado.
Las fotos de la página WEB no se corresponden con la realidad. Parece ser que hace años este hotel pertenecía a una cadena de hoteles internacional, pero hoy, marzo 2018, lo han dejado perder. La clientela era mayoritariamente del país.