Hostal muy céntrico con un supermercado a 2 min, además de estar a 5min de Gran Vía.
La habitación era bastante amplia con un balcón y, aunque el baño era un poco pequeño, suficiente para asearse cómodamente. Eso sí, la bañera era bastante alta y de entrada algo dificultosa si no tienes mucha agilidad o facilidad de movimiento.
La limpieza fue bastante buena y repusieron el jabón y gel que necesitamos.
En cuanto a elementos de la habitación, echamos en falta que hubiera perchas para colgar las toallas de baño y, por pedir, siempre se agradece una neverita. Por lo demás tenía 2 armarios amplios con varias perchas, un AC que funcionaba maravillosamente, bastante buena luz artificial tanto en baño como en la habitación en sí y un espejo de cuerpo entero fuera del baño.
También decir que tiene una discoteca al lado, nosotros nos alojamos en fin de semana, y se oía muy de lejos los graves de la música, ni siquiera el jaleo que pudiera haber en la calle, por lo que tiene que estar bastante bien aislado.
Por último, el personal que nos atendió fue muy agradable y pudimos dejar las maletas tanto a nuestra llegada, hasta que nos dieron la habitación, como el día que nos íbamos, sin ningún problema.
En definitiva, para estancias largas quizás puedes echar en falta cosas, pero para pocas noches está fantástico y tiene lo básico.