Hotel bien situado pero no recomendable para personas con movilidad reducida pues la zona es terrible por sus estrechas aceras. El hotel dispone habitaciones muy amplias, ese es el lujo de este establecimiento, el espacio. Decoración sencilla, sin lujos pero con calidad. Detalle gastronómico todos los días en la habitación. Buena insonorización pues la zona tiene mucho ambiente nocturno. Gimnasio bien equipado. Buen desayuno, bien servido, con variedad, aunque poca fruta, y preparan cualquier cosa de su amplia oferta de desayuno en un momento.
El personal de recepción muy atento para proporcionar la ayuda necesaria.
El único problema es el aparcamiento. Delante del hotel no hay sitio y en un lateral pueden parar un momento dos coches, mientras dejas la llave en recepción para que lo aparquen no se sabe dónde ya que el hotal no dispone de parking, por un precio de 25 €. Si ese pequeño espacio de parada está ocupado puedes provocar un buen atasco pues delante del hotel hay tráfico intenso.