Excelente servicio, el personal muy amable y atento. La habitación estaba bastante decente y limpia, con aire acondicionado, wi-fi, mini bar y televisión, tenía un pequeño balcón con vista al parque que está casi enfrente. El pequeño inconveniente que tuvimos fue el ruido que se escuchaba de los alrededores, de bares de algunas cuadras a la redonda que a lo lejos se escuchaba, pero nada que no nos dejara dormir.
El pueblo no lo percibimos tan amigable con el turista, en el hotel nos recomendaron un lugar para comer, que se veía bien, pero por ir a conocer la playa comimos en un restaurante de los que están en la orilla donde nos cobraron más de lo que decia el menú y se pusieron casi a pelear cuando les preguntamos porque salió más alta la cuenta, nos arrepentimos de no seguir la recomendación del hotel. La mayoría de Uber nos quería cobrar en efectivo el doble de lo que decía la aplicación, nos costó conseguir un viaje que no nos quisiera estafar, para el regreso nos ayudaron en el hotel a conseguir un taxi que nos cobro lo justo al aeropuerto.
El pueblo es pequeño y bonito, con una playa hermosa pero con bastante gente que se quiere aprovechar del turista, no fue el caso del personal del hotel que nos atendió muy bien, si algún día regreso a Boca Chica muy probablemente me quedaría otra vez en el hotel