Solo fue una noche y me arrepiento de no haber reservado 2. Las fotos no le hacen justicia, todo precioso, súper amables, atentos a lo que se nos ofreciera, nosotros nos quedamos en la habitación donde era la cava, precioso todo, la cama una delicia, las cobijas, almohadas. Cuando llegamos nos estaban esperando una tabla de quesos y carnes frías, y una botella de vino. Y como era nuestro aniversario mi esposo pagó un servicio de masaje para 2 y quedé encantada con eso. Está muy padre despertar con el sonido de los pájaros, hicimos el café en la habitación y salimos a caminar y todo hermoso. Ahí mismo te hacen el desayuno, te sientes como en casa, de echo es la casa de los dueños. El desayuno riquísimo, la infusión que te preparan tmb todo muy rico. Un desayuno muy completo, con fruta y plato fuerte! Mi marido quería ver las demás habitaciones y como éramos los únicos huéspedes accedieron. Todas están preciosas pero definitivamente en donde nos quedamos es la mejor. Sin duda alguna volveríamos.
