Reservé un tipo de habitación y nos dieron otra muy inferior a la contratada, con una ventana en el techo, donde se podía ver la montaña a través del reflejo en el espejo ,o suviendose en la cama, habitación sucia y deteriorada, polvo, pelusas, moho, manchas... Al estar abuardillada, no podiamos ponernos de pie en gran parte de la misma, y contando que solo cabía la cama y dos mesillas, no había opción de buscar otra forma de estar que tumbados o encogidos. En el baño no cerraba la puerta, a demás de suciedad, polvo y huellas por sanitarios y azulejos, al quejarme en recepción contradijeron todo lo dicho negando lo que reservé, y al enseñar el correo de confirmación sencillamente miraron a otro lado. Como hotel una porquería, como restaurante vergonzoso, como balneario bastante mediocre, educación y trato nulo. No lo recomiendo en absoluto, carisimo y sin encanto, lo único bueno es el entorno, pero eso no depende de ellos, con diferencia el peor sito en el que he estado.