Muy buena ubicación. A pasos de Mamilla, la puerta a la ciudad vieja y de la plaza de la música. Hotel cálido, lindo, modesto. El servicio del personal de recepción y del limpieza muy atentó y preocupado por hacer de la estancia una experiencia completa. La habitación es básica, con aparente pobre mantenimiento. Esta muy bien si es solo para dormir . Cama cómoda. No tiene heladera ni cafetera.