- A pesar de haber acordado desde España vía mail la recogida gratuita a la estación, no se presentó nadie y al llegar al hotel en taxi intentaron negar que hubiera sido confirmada y que fuera gratuita en lugar de disculparse, a pesar de mostrarle los mails que lo confirmaban. Además, a lo largo de la estancia no lo compensaron ni tuvieron el detalle de ofrecer el traslado a la estación el día del check-out, pidiéndonos un taxi.
- Baño pequeño y con poca iluminación.
- Al pedir cama de matrimonio, resultó que todas las habitaciones están equipadas con 2 camas individuales unidas a demanda.
- Situado en una zona residencial, lo que te obliga a desplazarte siempre en taxi a las zonas turísticas (6.000 soms la carrera).
- El desayuno no es buffet. Flojo y repetitivo (estuvimos 4 noches).
- Lo mejor, el restaurante situado justo al lado. El mejor de la ciudad aunque tienes que reservar (máximo a las 22h).