Muy buena ubicación y trato cordial. Pero, reservamos la habitación que eran dos habitaciones y dos baños. El primer día la puerta de uno de los baños se rompió quedando inutilizada, la cama de una de las habitaciones es un sofá cama bastante incomodo y la temperatura esta fatal regulada. Hace tanto calor que no hay quien duerma, y no se puede regular desde la habitación. Teníamos que tener la puerta abierta a ratos e incluso poner el aire acondicionado. Respecto a la comida, el desayuno es correcto pero para comer y cenar el restaurante es de comida indú por lo que si no te gusta el picante, olvídate.