Riad maravilloso para descansar, es muy tranquilo.
Pasamos frío en la suite executiva, tiene techos altísimos y el aire caliente del Split tarda días en bajar. Nos trajeron una manta y nos arreglamos. Habitación con poca luz pero es normal en los riads.
El desayuno es muy pobre comparado con otros riads del país de menos calidad.
La gente es agradable pero tampoco se involucran mucho, es un poco impersonal, no te ofrecen ningún otro servicio extra a menos que lo pidas, no es un sitio muy familiar que digamos.
Le faltan detalles para ser un establecimiento de esa calidad, unas zapatillas, una papelera en la habitación, minibar, vasos más grandes (son minúsculos)...algún detalle de bienvenida...
El riad es bonito, muy nuevo y bien ubicado