Nos quedamos una noche pero quedamos muy contentos con el maravilloso paisaje, el sonido del río es relajante, el clima es genial.
La habitación para tres personas es espaciosa, el baño tiene agua caliente y no demora en salir, las camas y la sábanas estaban súper cómodas. La terraza en el piso de arriba tiene una vista maravillosa y puedes pasar un rato agradable. Agradecemos por haber despertado temprano al personal para hacer nuestros desayunos para llevar. ¡Muchas gracias por todo!