Si vuelvo a Lisboa repetiré aquí. En una zona tranquila, con todo lo necesario alrededor, boca de metro, supermercados, parkings. El acceso a los apartamentos es un poco pequeño, como su ascensor, pero los apartamentos en sí están muy bien, muy completos. Lo limpian a diario, y su acceso con los códigos es muy sencillo, tienes un código a la entrada a los apartamentos y otro para entrar en el tuyo propio.