La zona es muy bonita y tranquila, con un montón de restaurantes, y bien situada, a 20 min. andando de la estación central. Lo que menos me gustó: la dotación de manaje era la mínima. Éramos 3 personas y nos dejaron en el apartamento 3 cucharas, 3 tenedores y 2 cuchillos (que apenas cortaban), 3 vasos, 3 tazas.... ¡Vaya con la exactitud suiza, que roza la tacañería!