Hotel situado en el centro de Cuijk, muy bien conservado, agradable etc etc. El único posible inconveniente son las escaleras, no tienen ascensor y las escaleras son bastante justas de tamaño con lo que tanto la subida como la bajada no es muy agradable si se lleva peso o perros.
La habitación muy cómoda, súper limpio y muy tranquilo. Tiene parquing particular por detrás, con lo que hace poder tener el coche tranquilamente estacionado.
En general muy contentos de haber descansado en el Hotel Taurus