Para ser un hotel 3 estrellas está muy bien. Las habitaciones son amplias y cómodas. Tiene parqueadero privado y la ubicación es muy central. Aunque en las fotos muestran que el hotel está en frente de la playa, al llegar me dijeron que era en otra torre (que no está en la playa), cosa que deberían aclarar antes de reservar, así como indicar cómo se reserva frente a la playa. El desayuno es básico pero está bien, mejoraría: poner fruta fresca y no de lata con almíbar, las manzanas que me comí estaban dañadas completamente y los huevos fritos tienen una cantidad de aceite increíble. Lo que menos me gustó y probablemente razón por la que no volvería: el servicio. Fatal desde el comienzo, absolutamente NADIE nos saludó en toda nuestra estadía, ni la persona que nos hizo el check-in, ni nos explicó horarios de desayuno, funcionamiento del parqueadero, etc. una cosa tan sencilla que se puede mejorar que no le cuesta nada al hotel, enseñar a sus empleados a tener una educación minima con los huéspedes