El trato es muy bueno, sobre todo el de Julia, la dueña. Una noche llegamos casi a la hora en que se iban a casa y tenían la cocina cerrada, pero aún así nos prepararon unas ensaladas para comer en la habitación. .. La zona no es precisamente la más bonita de Santorini, pero tienes la playa a 5 minutos a pie, y si alquilas vehículo para moverte, eso no será problema. El apartamento que nos dieron era sencillo, pero con encanto, estaba limpio y cambian las toallas a diario. La piscina es pequeña pero coqueta. A nosotros no nos dio tiempo de probarla, pero está bien.