El hotel tiene un acceso algo difícil, además el personal de limpieza desde las 8 am está llamando a la puerta, y su desempeño deja mucho que desear, hay polvo en el suelo, las sábanas y ropa de cama en general se ve deteriorada; las toallas percudidas y transparentes ya deberían ser cambiadas, regadera sumamente pequeña, una persona con algo de sobre peso no cabe. Recepcionistas hablan muy poco el inglés y es muy complicado comunicarte con ellos. No cuenta con plancha de ropa y al pedírselas fueron muy grosero en su negativa.