Al buscar el hotel ponía todo incluido, no sé qué pasó con la reserva que llegamos con una pensión completa, pensaba que era lo mismo. Llegamos a la piscina y pedimos unos refrescos y nos lo cobraron por falta de información desde el principio al no explicarnos que ccorresponde a la pensión completa. La cual es solo es las comidas principales, sin bebidas, las cuales las cobran a parte i carísimas. Un vaso de cola de máquina 2€, botella de agua grande 2,50€... y la comida nada del otro mundo.
Las toallas para usar en la piscina hay que pedirlas en el spa, dejando un depósito de 10€ por toalla... :(
La habitación que nos dieron parecía un horno, anticuada, el techo del baño con hongo; el suelo, el cubridor del papel higiénico y la papelera super sucias, al igual que los colchones y los cubrecama.
No me gustó para nada.