La gente de recepción no es muy amable en su trato, a excepción de una de ellas, que lamentablemente no recuerdo su nombre, pero estaba en turno del último día de mi estadía.
Mi habitación no tenía citófono ni caja de seguridad, no hubo una predisposición inmediata a resolver mi problema, tuve que exigir cambio de habitación, a lo cual finalmente accedieron. Me sorprende que al ser un hotel 5 estrellas no hacen sentir al pasajero como corresponde, me tocó ver situaciones de reclamo de otros pasajeros con el mismo trato.
Las camas y la habitación en general muy cómodas, la vista increíble al mar.
El desayuno, esperaba mas, el primer día muy básico, con detalles como por ejemplo que huevos estuvieran fríos por no contar con un recipiente tapado, segundo día hubo mas variedad. Tiene todo para ser un hotel increíble en su condición de 5 estrellas, pero depende sólo dep personal a cargo.