En general la estancia buena, sin embargo no deja de llamar la atencion la diferencia entre el recepcionista del dia (persona mayor) y el de la noche y madrugada, si con el primero acordabas una tarifa por ejemplo del bus a Copacabana el de la noche te intentaba aumentar el precio, lo mismo con la tarifa del hotel al pagarla tambien intentó aumentarla. No avisó para despertar a la hora acordada, etc. Del señor del dia nada que decir. Recomendaria a los administradores evaluar el comportamiento del funcionario ya que desacredita al hotel y el servicio.