El proceso de Check-In y Check Out es pésimo. Tan solo tienen dos trabajadores y no dan a basto, se forman unas acumulaciones de gente tremendas. Además los carteles informativos en la recepción apenas se ven. El servicio de limpieza no rellena los servicios mínimos de higiene personal (toallas, jabón de manos, etc). Además, como agravante, entran en la habitación a primera hora de la mañana (a las 8:00) sin avisar, invadiendo la intimidad y la privacidad de los huéspedes. No recomendaría este hotel a ningún conocido que tenga en estima.