8/10
El hotel se encuentra ubicado a pocos minutos caminando de una de las entradas de la muralla de Lucca. Es un Villa antigua con estacionamiento propio lo cual es muy conveniente para quienes llegan con vehículo por lo complicado que es estacionar dentro de las murallas. Luca, su gerente es muy amable y está dispuesto a darte todas las recomendaciones necesarias. El hotel tiene alquiler de bicicletas. La habitación era bonita y suficientemente amplia. Nos colocaron galletas, chocolates y panettone en la habitación. Un lindo detalle. Punto a mejorar los colchones de las camas. Del resto fue estancia bastante agradable.
Rosaura
Viaje en familia de 1 noche