El recepcionista q nos hizo el Chek in, encantador, no podíamos con la TV, estaba desconectada y enseguida subió. La habitación, muy acogedora, con ventana en la buhardilla, se veía la montaña, con sus nubes, muy bonito.
Le pregunté para el desayuno, ya q soy Celíaca e intolerante a la proteína de la leche, si podía bajar lo q yo consumo, me dijo q lo bajara sin problema. Al día siguiente, había otro chico, se lo comenté, me calentó mi leche de arroz, yo llevé tamb mi pan y Embutido, y aún así, me cobró los 7,50€, cosa, q en ningún otro hotel q he estado, me han cobrado...., muy feo, gracias por calentarme la leche, pero...