Lo primero fué el recibimiento del dueño. Le había enviado 2solicitudes de check in antes de las 15h, pero no me respondieron. Al ver un cartel allí que ponía la posibilidad de check in a las 13h le pregunté. Respondió que a él no llegó nada, que sería problema de Expedia, prosiguiendo:"no es problema mío"...le tuve que "bajar" un poco los humos a éste señor y le dije que desde luego mío no era...mala entrada ya. El miércoles nos deberían haber hecho la habitación.Pasó 2 veces esa mañana una sra rubia(creo que era la jefa de limpieza)estando yo sentado fuera y ni me preguntó que a qué hora podrían entrar...nos fuímos y a las 16.10h volvimos.Acto seguido vino una chica a decirnos que si nos hacía la habitación.Muy agradable ella.Le dije que habían tenido toda la mañana para ello y que íbamos a descansar ahora.Nos cambió la basura y le pedimos toallas.Sin embargo a la mañana siguiente, que ya nos íbamos, entró otra de limpieza a las 8.40h, despertándonos.Nos dijo que le constaba que estaba libre.Le dije que se informase primero mejor porque aún no nos habíamos ido.La limpieza aún así deja mucho que desear. Solo en la puerta de madera de entrada ya hay unas enormes telarañas, las cuáles se ven a kms de distancia, con lo cuál no se limpia éso por dejadez, no porque no se vea. Para rematar está "el niño del Maserati", que creo que es el dueño del bar que está integrado en recepción.Éste chico es un auténtico gi..íntegro y da bastante mala imagen a éste complejo.Tuve varias con él