La ubicación es un poco mala si lo que buscas es fiesta pero si quieres diversión y algo de relax es genial. Una pequeña cala de piedra a 50 metros te da la tranquilidad que necesitas, la piscina de hotel está amenizada todo el día con agua gym, cócteles, música nocturna, el personal es súper atento y amable, especialmente la camarera cubana y el socorrista, el hotel cuenta con bufet libre de desayuno, comida y cena a unos precios más que buenos, la relación calidad y variedad por el precio es insuperable en la zona, las camas eran enormes, el balcón muy cómodo, como “peros” o “a mejorar” en el bar de la piscina deberían dejarte apuntarlo a la habitación, sería bueno que el personal de recepción dejase las llamas personales y atendiera al cliente el chico de gafas concretamente, la falta de interés y las malas maneras de este chicho ensucian el trabajo del hotel (no solo fue con nosotros le vimos esa actitud con otros clientes ) en general 10/10!!! VOLVEREMOS!