Entiendo las buenas criticas ya que la ubicación es ideal y las instalaciones son cómodas. Me hospedé en este hotel varias veces e incluso lo recomendé.
Al llegar a la habitación, había varios problemas menores (heladera que perdía agua con un charco debajo, ni el televisor ni el teléfono funcionaban, no había secador de pelo) que recién después de 2 horas de espera, y ante un insistente segundo reclamo en el front desk, vinieron a resolver.
El gran problema fue cuando tomé una ducha y no había agua caliente. Varias veces fui al front desk a consultar, me ofrecieron cambiar de habitación y cuando fuimos a verla, TAMPOCO tenia agua caliente. Dos veces pregunté si había agua caliente en el hotel e insistían en que sí. Agua caliente es un servicio básico que cualquier hotel debe brindar y por el que uno paga. Recién al segundo día, y luego de varios reclamos, se dieron cuenta que no había agua caliente en todo el hotel y lo resolvieron. La gerenta no se presentó en ningún momento y las personas del front desk parecían enojadas por recibir un reclamo solicitando algo tan básico como agua caliente y que no resolvían. Hubo un señor, el único correcto, que se acercó a mi habitación, pidió disculpas,entendió la situación y dijo que se encargaba de solucionarlo y que no iban a cobrar la primera noche. Esto último, fue mentira, cobraron el total porque, claramente, además de no resolver un problema, tampoco cumplen con su palabra.