El resort en general anda bien, sin dudas se destaca lo servicial que es la gente y su amabilidad. Sin embargo, las habitaciones eran más viejas, los baños con mucha humedad, incluso creo que habían termitas. La cama estaba bien, no es súper cómoda pero salva. Fuimos con mi familia y al principio el alojamiento quedaba cruzando la calle algo que no me había percatado en el momento de hacer la reserva, tenía telas de araña, arañas en la cocina, incluso una cucaracha muerta. Por eso pedí el upgrade de habitación porque realmente daba la sensación de suciedad en la habitación. En la última habitación, estuvo mucho mejor, vistas al jardín/piscina y el desayuno era muy bueno, pero dudo que vuelva a ese lugar con mi familia.