Mi opinión va a ser de lo más sincera como padre de dos niñas con las que viajamos a este hotel. Lo cogí por los comentarios buenos pero si soy sincero, no lo volvería a coger porque no está tan céntrico coo se dice. Tienes a 10-15 minutos la estación de tren, pero yendo con niños pequeños por la mañana temprano para hacer excursiones y con el frío, se les hace eterno. Por la noche, la vuelta da un poco de miedo porque anochece pronto y no hay nada por los alrededores.
Otra pega es que NADIE, y cuando digo NADIE es NADIE en el hotel habla español así que te entiendes más o menos como puedes en inglés.
El hotel es una maravilla porque está muy bien cuidado y la limpieza es de 10, no lo aparenta a primera vista cuando lo ves desde el experior que da sensación de viejo. El restaurante un poco caro, un plato de filete empanado 21 € y un cola cao para la niña, casi 7€ nos cobraron. El desayuno tipo buffet es una maravilla, hay de todo. Contento pero no volvería.