En un viaje a Vilna, Radisson Blu Hotel Lietuva es una fantástica opción de alojamiento. Regálate una sesión de masajes, tratamientos faciales o manicura y pedicura en el spa y acércate a comer algo al Riverside, que sirve desayunos, almuerzos y cenas. Otros aspectos destacados de este hotel sostenible incluyen 2 bares con salón, un gimnasio abierto las 24 horas y un gimnasio. A otros viajeros les encanta la amabilidad del personal.