Está cerca del aeropuerto, un hotel que parecía bastante nuevo y moderno, las habitaciones muy grandes, lo malo, lo de siempre, el colchón que era bastante incómodo.
La playa privada que tiene cruzando la carretera es espectacular, con tumbonas, chill out hamacas, la arena fina y el agua perfecta.
Un sitio para repetir!