Fácil de acceso, personal encantador, habitaciones super agradables, aunque yo no pondría moqueta en el comedor para las personal alérgicas como yo, bueno... Muy bien situado al lado del Corte Ingles, ideal para las compras e incluso para comer, la verdad es que si tuviese que volver a Lisboa, allí iríamos de nuevo.
Las almohadas no son de lo mejor (demasiado voluminosas y blandas), sino la cama muy bien. ¡Ah! y en hora buena para las ventanas : no se hoyen las decenas de vuelos que pasan por encima de nuestras cabezas, estamos muy muy bien aislados. Para decirles la verdad : el último día no quisimos salir : estábamos demasiado bien "en casa".
Por favor, me pueden dar el mail del hotel, que me he dejado algo en la habitación, a ver si lo han recuperado. Gracias.