Muy limpio el baño sobre todo, te hacen limpieza y cambían las toallas diario.
Personal muy amable, habitaciones cómodas para parejas, todo está cerca, supermercados, farmacias, cafeterías,tiendas para comprar, buses para trasladarse y el metro a unos cuantos pasos. Maravillosa vista de la torre Eifel sin duda regresaremos a este lugar, se los recomendamos.